La Fianza, «un nuevo monstruo en casa».

Título original: La fianza

Año: 2024

Género: Thriller

Duración: 92 minutos

País: España

Dirección:Gonzalo Perdomo

Guion: Andrés Martorell, Gonzalo Perdomo

Reparto: Juana Acosta, Israel Elejalde, Julián Román

Fotografía: César Pérez

Música: Lucas Vidal

Compañías: 

Bad Dogs Productions

 

La Fianza, es el debut del director Gonzalo Perdomo, un audaz juego de deconstrucción de clichés y prejuicios, donde nos sumergimos en la exploración de la condición social, femenina y las estructuras sociales que nos rodean. La película; producida por Bad Dogs Productions, se centra en Ana, interpretada de manera perspicaz por Juana Acosta, cuya vida da un giro inesperado tras la celebración del sexto cumpleaños de su hija. La llegada de Walter, encarnado por Julián Román, un desconocido que reclama a su esposo, Ricardo, interpretado por Israel Elejalde, desencadena la exposición de las grietas en la estructura familiar de Ana.

Desde el primer momento, Perdomo establece un ambiente de tensión palpable, creando una atmósfera claustrofóbica propia del argumento universal Un Monstruo en Casa, donde el protagonista debe enfrentarse a una amenaza inesperada dentro de su propio hogar. Sin embargo, este cliché se rompe a lo largo de la película, revelando que el verdadero monstruo siempre ha estado en casa. La amenaza se convierte en un golpe de realidad que impulsa a Ana a liberarse de las cadenas que la oprimen, buscando un verdadero hogar donde sea respetada como mujer.

A través de giros sutiles y cargados de ironía, la narrativa se desarrolla como un complejo juego de poder y cambio de roles. Ana, inicialmente atrapada en la opresión de su verdadero ser, encuentra en la figura de su captor un catalizador que la lleva a desafiar los prejuicios y clichés sociales que la limitan. Su viaje es una lucha por aceptar su verdadero poder y reivindicar su identidad.

Perdomo, junto a su equipo de fotografía, opta por una estética que complementa el tono sombrío de la historia. La iluminación tenue y los encuadres cuidadosos intensifican la sensación de aislamiento, mientras que la dirección de arte refleja la dualidad en la vida de Ana: la calidez de un hogar familiar frente a la frialdad de las revelaciones que amenazan su realidad.

Los diálogos y el guion son un brillante juego de ironía, repletos de subtexto. La crudeza de la realidad social se despliega ante nosotros, revelando la diferencia de clases que permea en la vida cotidiana. Walter, a través de su presencia, representa la aceptación de esta condición, obligando a Ana a confrontar la realidad de su matrimonio y las opresiones sociales y económicas que enfrenta en una sociedad europea donde el egoísmo y la mentira son el pan de cada día, personificados en Ricardo.

La actuación de Acosta es excepcional; deconstruye el arquetipo de la mujer indefensa y nos presenta a una mujer astuta, que siempre ha sabido cómo actuar en beneficio propio, utilizando su ingenio para sobrevivir en un entorno hostil. La lucha interna de Ana, atrapada en las convicciones sociales relacionadas con la familia, el poder y el dinero, resuena profundamente en el espectador.

La Fianza trasciende la etiqueta de un thriller clásico; es una reflexión sobre las complejidades de la sociedad contemporánea, la lucha de clases y la condición femenina. Nos recuerda que nuestra voluntad de ser libres es la fuerza que nos impulsa hacia la realización de nuestros deseos. Perdomo logra crear un retrato crudo e irónico de la condición humana en su forma más vulnerable, mostrando cómo las apariencias son construcciones frágiles. En las altas esferas, la corrupción y el egoísmo son los adjetivos más descriptivos.

Esta película invita a cuestionar la naturaleza de los conceptos sociales que tenemos impuestos: ¿realmente seremos más felices en aquellos lugares donde siempre nos dijeron que encontraríamos la dicha? La Fianza es un recordatorio de que nada es lo que parece; la verdad siempre encuentra la manera de salir a la luz, dejando tras de sí un rastro de vulnerabilidad humana y una búsqueda de redención que resuena con una amplia audiencia.