«This is Us» se consolida en la pequeña pantalla

[Contiene SPOILERS del capítulo 1×18 y un spoiler de la primera temporada]

Si hace unos meses os daba 4 motivos para ver This is Us con tan sólo seis capítulos emitidos, ahora, tras haber puesto punto y final a su primera temporada con dieciocho episodio os podría dar diez motivos más. Parece pues que las nominaciones a los Globos de Oro o ganar un AFI (American Film Institute Awards), entre otros, no son un simple capricho. Esta serie ha firmado una primera temporada muy notable, que merece el reconocimiento que se está ganando y sin duda, es digna de que la esperemos hasta otoño con los brazos abiertos.

This is Us ha conseguido que se la vaya echar de menos tras 18 capítulos. This is Us ha pasado de ser la promesa que era en el episodio seis a ser la realidad que es en su season finale. Sus últimos 40 minutos antes de la segunda temporada no han decepcionado. Han vuelto a sus orígenes: ¿cómo se conocieron Jack (Milo Ventimigilia) y Rebecca (Mandy Moore)? Al fin y al cabo, es su historia de amor la que permite contar las vivencias de la familia Pearson. Pero de modo casi irónico, de este origen, pasamos también por el que por ahora, parece un final.

Si en los flashbacks de los años setenta veíamos como Jack y Rebecca se conocían; en los flashbacks de los años noventa, con los trillizos de adolescentes, los Pearson tienen la pelea más seria de su matrimonio y para sorpresa del público (o al menos, la mía) deciden darse un tiempo. Por primera vez en toda la serie, el matrimonio estará separado. ¿Cómo afectará esto a la narración de la serie (en los años noventa)? Y todo esto, con la gran pregunta sin responder pero se intuye fácilmente que la respuesta está en el horizonte.

Un día normal en la familia Pearson.

La pelea entre Jack y Rebecca nos realza la realidad en que se intenta basar This is Usy que en parte, la que consigue ‘enganchar’ al públicoThis is Us nos cuenta el día a día de una familia (un tanto) especial. Si tenemos en cuenta que la historia de los dos progenitores era quizá, la que tenía más azúcar de todas las tramas de la serie, en esta season finale nos han bajado los pies en el suelo (un poco, sólo). Pero no siempre nos van a dar la gran escena en que al final deciden no darse un tiempo y volver a ser un matrimonio feliz. Tampoco nos han evitado muertes, ni ataques de ansiedad. Si vivimos esto en nuestro día a día ¿porqué no iba a vivirlo This is Us?

Aún así, no todo han sido mazazos emocionales. No, no todo es un drama. ¿Que tiene ligeros toques de comedia? Quizá alguno, sí. Pero no es una de las características que más destaca. Sí que lo hace la magia que desprende la serie y que es a su vez, la que la vuelve tan necesaria cada semana. Igual que hemos tenido momentos duros, This is Us permite conectar muchísimo con ella . Con sus momentos buenos y sus secuencias entrañables, se respira una especie de magia, bien creada por el buen trabajo de los guionistas al desarrollar los personajes y sus guiones.

Y hablando de personajes y de magia, es inevitable hablar de Jack Pearson. Será el padre del año, probablemente. Es el personaje más querido de la serie, y se lo ha ganado a pulso, haciéndonos creer en momentos puntuales idílicos, en la felicidad y otra vez, en la magia. Se ha ganado ser el personaje más carismático. Se ha ganado parte del liderazgo de la serie. Y todo eso, sin quitarle ese realismo del cual os hablaba antes. Y por eso, probablemente nos enfrentemos al capítulo más emocional de la serie el día que nos respondan el CÓMO.

La saga Pearson. Aunque cada uno haga su vida, les une un vínculo demasiado especial.

Que Jack no le quite méritos a un fantástico reparto, por eso. Los hijos de los Pearson también tienen un perfil muy bien elaborado y han compartido muchos momentos que también nos han gustado. En los ochenta y noventa y en la actualidad, los actores y las tramas dan la talla. Sin alguna duda. Así hemos identificado con Kevin (Justin Hartley) cada vez que duda de si mismo; con Kate (Chrissy Metz) y su propia cruzada con su obesidad; y con Randall (Sterling K.Brown) y el reto de vivir con su padre biológico durante sus últimos meses de vida. Jack, Rebecca de joven y los trillizos y sus famílias, son el alma pura de la serie. Que no nos los quiten. No a más de uno, por favor.

This is Us  se despide de su primera temporada con un notable muy alto, o por qué no decirlo, un excelente. Lo que empezó siendo una promesa y una duda de «¿hasta cuánto tiempo te puede enganchar sólo la cotidianidad?» es ahora una realidad que la apoyan premios y una buena crítica. Emoción, ternura, magia y una dosis de realidad. Unido a unos entrañables personajes, esta serie ha conseguido que la esperemos ansiosos el próximo otoño. Hasta pronto, This is Us.