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#OscarSoWhite: ¿talento minoritario o minorías sin talento?

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Entre los nominados a los Óscar predomina un blanco caucásico tan irreductiblemente blanco y caucásico que ofende la vista. La ausencia de actores negros por segundo año consecutivo no ha sentado nada bien en el país de las barras y estrellas. Tan negros les ha puesto que algunos han decidido boicotear la ceremonia. El popularísimo #OscarSoWhite no es un hashtag: es un martillo de conciencias: un moderno Bruto que amenaza a los 6 mil césares de la Academia. Pero el victimismo es contagioso, ¿sabe usted?, y los blancos no han querido ser menos. Una veterana intérprete ha puesto la mano en el fuego al hablar de racismo hacia los blancos, y Michael Caine se ha quemado diciendo que «no puedes votar a un actor sólo porque sea negro». ¿Y por qué no?, se pregunta este articulista.

¿Con qué derecho los Óscar reconocen el valor artístico del actor pero se desentienden del color del actor? Uno se pasa la vida trabajando como un negro para nada, como si lo fuera por gusto o se empeñara en llevar la contraria a los blancos. Basta ponerse en la piel de Spike Lee, Will y Jada Smith y otros boicoteadores para comprender esta injusticia.

—¿Arte? No me hable usté de arte que estoy mu’negro —fue la respuesta de un anónimo de color al articulista—. ¿Sabe cuánto actores negro se’an llevao un Osca en lo que llevamo de historia?

¡Y no le faltaría razón! Sorprende que desde 1929 menos de una quincena de intérpretes afroamericanos hayan recibido la estatuilla dorada. A uno le hace formularse un par de preguntas. Por ejemplo, si estamos ante una talentosa minoría a la que se ha cortado las alas o ante una minoría sin talento que se escuda en el racismo y sangra las viejas heridas esclavistas cuando le parece oportuno.

Como quiera que sea, sugiero que se excluyan a todos los actores y actrices blancos de los Óscar hasta que los ganadores de los Óscar ofrezcan un perfecto equilibrio entre razas y géneros. Sólo entonces pondremos a los Óscar en modo alternative track: blanco-blanca-negro-negra y vuelta a empezar. Sin embargo, esta medida podría tener un efecto rebote, como vimos en la Ley Seca. Baste que a uno le prohiban el alcohol para que se alcoholice al punto y todavía le falte tiempo para montar una licorería en su vivienda. Así también los blancos podrían dar la espalda al cine o los negros empezar a hacer peliculones como churros fuera de turno.

Para mí un asunto mucho más indignante y controvertido es el de los bajitos en el cine. ¡Qué poca representación tenemos los bajitos en el cine! Y claro, los enanos cabezones de este mundo también merecemos un lugar entre los nominados. Otra razón de peso para boicotear estos Óscar. Pensar que un hombre pueda ser oscarizado sólo por su talento y méritos personales… Decididamente el arte está sobrevalorado.