La pasada madrugada se celebró, en los Ángeles, el más importante de los eventos del mundo del cine: los premios Oscars 2018.
Hace tiempo que las citas cinematográficas anuales dejaron de ser solo una ocasión para otorgar premios y reconocimientos a películas y actores. Ahora se defienden causas tan importantes como el feminismo y la igualdad dentro del sector. Aunque, esta vez, la lucha no se vistió de negro, las mujeres consiguieron convertirse en protagonistas de la noche a través de memorables discursos como el de Frances McDormand.
La proclamada “Mejor Actriz”, compartió nominación con otras talentosas compañeras de profesión como Saoirse Ronan (Lady Bird), quien escogió el rosa pastel para la ocasión. Firmado por Calvin Klein, su vestido nos hizo soñar con los maravillosos años 50.
A su derecha, Emma Stone se atreve con un pitillo de Louis Voitton, firma de la que es imagen la “Mejor Actriz” del año pasado. Y como de mujeres ganadoras va la cosa… nos encanta el vestido brillante de Dior que eligió Jennifer Lawrence. Su melena salvaje es el complemento perfecto.
Las más veteranas fueron el centro de todos los flashes. Una Jane Fonda guapísima, a la que no parecen afectarle los años, nos sorprendió con un vestido hecho a medida de Balmain. Le sigue Nicole Kidman, que apuesta por un diseño arquitectónico de Armani Privé en azul Klein. Por último, la “Mejor Actriz Secundaria” Allison Janney (Yo, Tonya), luce un espectacular vestido de Reem Acra en ese color que, cuando se trata de asistir a una gala de tal envergadura, nunca falla.
En cuanto a los hombres de la noche, aportar un toque de originalidad fue misión de las nuevas generaciones.
Tom Holland, aunque fiel al eterno negro, arriesgó con un tuxedo cruzado; al igual que el protagonista de Baby Driver, Ansel Elgort, que se dejó abrigar por el –tan en tendencia- terciopelo. Sin embargo, no consiguieron hacerle sombra a Timothée Chalamet. El joven de 22 años, nominado a “Mejor actor” por Call me by your name, combinó esmoquin blanco de Berluti con botas cowboy.
Cierran la galería tres talentosas mujeres de pelo oscuro, aunque no todas de la misma procedencia. Desde España, llegó a Los Ángeles Paz Vega, enfundada en un diseño de Christopher Bu que mezclaba distintos estampados.
Zendaya apostó por un vestido vaporoso de Giambattista Valli marrón, un color poco habitual en este tipo de eventos, que la actriz supo defender a la perfección. Por último, Allison Williams se convierte en una de las favoritas de la crítica gracias a un diseño de organza y un look muy natural.