Título original: Captain Fantastic
País: Estados Unidos
Año: 2016
Duración: 118 minutos
Director: Matt Ross
Reparto: Viggo Mortensen, George MacKay, Missi Pyle, Kathryn Hahn, Frank Langella,Hannah Horton, Nicholas Hamilton, Steve Zahn, Ann Dowd, Trin Miller, Samantha Isler, Annalise Basso, Shree Crooks
Música: Alex Somers
Guion: Matt Ross
Género: Drama, Cine independiente
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Captain Fantastic es una ficción de Matt Ross, estrenada el pasado mes de septiembre. Cuenta la historia de Ben (Viggo Mortensen), un hombre que ha pasado diez años viviendo en los remotos bosques situados al noroeste del Pacífico criando a sus seis hijos. Sin embargo, las circunstancias hacen que tal peculiar familia deba abandonar su modo de vida en la naturaleza y volver a la civilización. Asimilar su nueva situación y adaptarse de nuevo a la sociedad moderna, algo que no les va a resultar nada sencillo.

Una película peculiar, entretenida y obligatoria, que da durante su casi hora y media de duración una bofetada a la sociedad contemporánea e hiperconectada. Cierto es que en ocasiones, algunas aspectos en los que Ben cría a sus hijos puede resultar utópica, sin embargo, considero que el mensaje que se intenta transmitir con esta cinta no es de formas alternativas de vivir, sino el llevar al espectador a la reflexión sobre la manera en la que vive, a las cosas que le da importancia.
Un Montensen fantástico y un elenco de jóvenes actores asombrosos. Seis hijos con diversas personalidades y una visión del mundo totalmente distinta, conscientes del mundo en el que viven realizan cada vez que pueden una muestra de sus habilidades y abundantes conocimientos, aunque particularmente algunos de mis momentos favoritos de Captain Fantastic se basan en la crítica que hacen los más pequeños al capitalismo, a la religión y a la educación.

Esta familia, que de convencional no tiene ni un pelo, no solo se enfrenta al juicio de la familia materna, en desacuerdo con la forma de educar y enseñar a los niños, sino que también se desarrollan conflictos entre ellos. Un joven adolescente que desea adentrarse en la sociedad mercantilista e hipócrita de la que sus padres han querido alejarle, dos pequeños que no superan los 10 años que se mueren por probar una hamburguesa y un batido o 2 preadolescentes que intentan superarse así mismas y temen por no poder afrontar el mundo “real” y un pubescente enfadado con la realidad que su padre ha creado para él y dolido por la pérdida su madre.
Sin duda, celebrar el «Día de Noah Chomsky« es uno de los guiños más cómicos e introspectivos de la película. Si le sumamos un final, desde mi punto de vista, menos atrevido en comparación con el conjunto, pero emocional y respetable obtenemos lo que ha sido una de los dramas más provechosos de este último año.

La meta de unos padres aislados de un mundo comercializado, que luchan porque sus hijos sean reyes filósofos y brillen en una sociedad oscura y manchada por la corrupción, el dinero, donde se educa a autómatas irreflexivos, en lugar, de defender el saber y las diferentes artes.
“Cuando hagas el amor con una mujer escúchala, cuídala y respétala, aunque no la ames”, aconsejaba Ben a su hijo mayor al final de la película y es que Captain Fantastic no solo da lugar a meditar, también nos hace recordar aquellos valores olvidados y necesarios.