‘Puzzle’, no es sólo una afición

Título original: Puzzle

Año: 2018

Duración: 103 min.

País: Estados Unidos

Dirección: Marc Turtletaub

Guión: Oren Moverman

Música: Dustin O’Halloran

Fotografía: Chris Norr

Reparto: Kelly Macdonald, Irrfan Khan, Bubba Weiler, David Denman, Daniel Stewart Sherman, Austin Abrams, Liv Hewson

Productora: Olive ProductionsDistribuida por Sony Pictures Classics

Género: Drama | Cine independiente

Ficha en Filmaffinity 

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Que no lleve a engaño el escueto título de la película. El mundo de los rompecabezas como afición o incluso como objeto de competición profesional (hay gente para todo), no es la trama principal de esta versión estadounidense de la argentina Rompecabezas (Natalia Smirnoff, 2009).

Se presenta como una bonita alegoría de la vida. El mundo de los rompecabezas no es sino una escapatoria, una forma de evasión para la abnegada ama de casa y madre ‘profesional’ Agnes e interpretada por Kelly Macdonald. Juntar esas piezas de puzzle le supone un auténtico remanso de paz. Su particular oasis en medio de una vida monótona, anodina y entregada a sus quehaceres domésticos y sociales.

Kelly Macdonald cumple perfectamente con ese perfil de mujer blanca tradicional de clase media y afecta a su comunidad religiosa. Y habiendo sido criada y educada para ser servicial y complaciente con los suyos, ha renunciado incluso a sus propias inquietudes y voluntades. Es precisamente lo que hace de esta película una propuesta interesante, sobre lo que reflexionar. No busca en Agnes esa ya estereotipada figura de la mujer emancipada o “empoderada” de propaganda política. Va un paso más allá, ya que Agnes no busca hacer ninguna reivindicación feminista sino una reafirmación personal, algo más auténtico e introspectivo. Necesita liberarse personal, sentimental e intelectualmente de todo y de todos.

Así pues, lo que empieza con un inocente interés por una afición como la de los rompecabezas acaba por ser determinante en su vida. Le ayuda enormemente a reflexionar sobre su existencia y su papel en la vida. A abordar sus asuntos personales y plantearse seriamente otros pendientes de realizar: como ese ansiado viaje o profundizar en el estudio de las matemáticas que siempre le entusiasmaron.

puzzle
«…a diferencia de la vida, cuando completas un puzzle sabes que has tomado todas las decisiones correctas…»

La evasión de su realidad al sumergirse entre las piezas le hace más clarividente, y por fin no es ni la imposición de «sus obligaciones maritales o familiares» ni siquiera las exigencias de su compañero de afición, lo que le impondrá el nuevo rumbo de su vida.

Al fin y al cabo esas aspiraciones insatisfechas se deben tanto o más a la inacción de la protagonista que al entorno social y cultural que le influye. Por suerte para ella, comprueba que nunca es tarde para reorientarse y tomar las riendas de su vida.

Consiste en el poder de la libertad de elección y de tomar las decisiones a pesar de que en la vida encontremos personas e instituciones que traten de imponernos su visión de la misma, por encima de la nuestra.

En definitiva, es una película recomendable, de esas que ayudan a reflexionar sobre el rumbo de la vida, si centrarnos en la vida familiar o dedicarlo todo en exclusiva al desarrollo personal y profesional. Decisiones que al fin y al cabo no dependen más que de la voluntad de uno mismo sin que una opción u otra sea ni peor ni mejor, simplemente la que libremente escoja cada uno para si mismo.

Por cierto, otra buena razón para ver esta cinta es la de presenciar una de las últimas apariciones del recientemente fallecido Irrfan Kahn. El actor indio que ha sido todo un referente en el mundo occidental de esa poderosa y pujante industria de Bollywood. Aunque secundario, su papel es relativamente importante ya que en buena medida es parte del desencadenante del cambio personal de Agnes.

Puzzle está actualmente disponible en Netflix.

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Lo mejor: la reflexión sobre la complejidad de las decisiones personales, y el replantearse la existencia vital desde la libertad de elección individual.

Lo peor: que sea tan calcada a la película original argentina.

Nota: 6,5/10