Febrero ya prácticamente ha acabado, sin embargo, no hay que olvidar que en este mes se celebra el Women in Horror Month, una iniciativa internacional que, desde hace años, trata de reivindicar el papel de las mujeres en todos los ámbitos del género de terror. Puede que ya estemos a las puertas de marzo, pero eso no nos impide dedicar un artículo para hablar sobre esto.
Jennifer Kent (Babadook), Ana Lily Amirpour (Una chica vuelve a casa sola de noche), Anna Biller (The love witch), Karyn Kusama (La invitación), Jackie Kong (Blood diner), etc. Son muchas las directoras de las que podríamos hablar; sin embargo, a continuación, solo haremos un breve repaso de algunas películas cuya dirección y guion corren a cargo de mujeres:
Leigh Janiak: Honeymoon (2014)
Esta película supone el debut de Leigh Janiak como directora y guionista. Una pareja de recién casados pasa su luna de miel en una cabaña, que es propiedad de la familia de la novia. Lo que empieza siendo algo idílico, pronto se torna terrorífico porque la novia empieza a comportarse de forma extraña. Lo sobrenatural como pieza clave para abordar el conflicto del matrimonio y las relaciones. Es importante destacar las interpretaciones de Rose Leslie y Harry Treadaway.
Issa López: Vuelven (2017)
Aunque con un envoltorio sobrenatural y fantástico, Issa López construye de manera inteligente un relato crudo y realista sobre una problemática social. Con un grupo de niños, tres deseos y tigres como símbolo de protección y fortaleza, Vuelven habla de la pérdida de la inocencia, la orfandad y trata de hacer una crítica a la violencia y la criminalidad que reinan en algunas partes de México.
Julia Ducournau: Crudo (2017)
La opera prima de Ducournau no dejó indiferente a nadie. Se trata de un coming of age teñido de sangre. Justine, una chica vegetariana, entra en la facultad de veterinaria para seguir los mismos pasos que sus padres. En un intento de encajar, prueba la carne cruda. Lo que en principio no parece nada grave, pronto traerá graves consecuencias y cambios que le harán descubrir su verdadera naturaleza. No solo aborda el paso hacia la madurez, sino que también usa el canibalismo como metáfora del despertar sexual.
Jenn Wexler: The Ranger (2018)
Jenn Wexler pone el punk como banda sonora a este slasher. Que no os despisten los colores fosforitos del pelo de los personajes o de las luces de los locales, porque The Ranger tiene el espíritu de los slasher ochenteros. Unos jóvenes se encuentran escondidos en una cabaña en un bosque tras huir de la policía; sin embargo, la aparente calma se verá interrumpida cuando alguien empiece a acecharlos.
Emma Tammi: The Wind (2018)
El western y el terror van de la mano en The Wind. La película de Emma Tammi usa el paraje desolador y el componente sobrenatural para construir un relato que habla de la soledad y el fanatismo religioso. Siglo XIX, Lzzy y su marido se asientan en el salvaje oeste, pero la estancia allí empieza a hacer mellas en ambos. Sin embargo, es una presencia siniestra y la aparición de otra pareja lo que finalmente aterra y angustia a Lzzy.
Marina de Van: Dans ma peau (2002)
Cuando se trata del nuevo extremismo francés, tenemos claro que las grandes dosis de sangre y violencia están aseguradas. La película de Marina de Van usa el canibalismo y la automutilación para construir un relato crudo y asfixiante. Después de sufrir un accidente, Esther empieza a tener una enfermiza obsesión por su propia carne y sangre, lo que desencadenará en una serie de atrocidades.
Veronika Franz: Goodnight Mommy (2014)
Una madre, dos gemelos y una casa. Con la fotografía, el sonido y el comportamiento de los personajes, poco a poco el clima se va enrareciendo y la tensión se incrementa. La sinopsis es sencilla: Lukas y Elias esperan en su casa a su madre, que acaba de someterse a una operación de cirugía plástica. Las vendas y el comportamiento extraño de la mujer harán dudar a los gemelos, quienes creen que se trata de una impostora. La película de Veronika Franz y Severin Fiala recurren la figura del otro aterrador y siniestro para abordar una historia de traumas y miedos.
Roxanne Benjamin: Southbound (2015)
Roxanne Benjamin no solo se ha encargado de la producción de V/H/S, sino que también dirige y escribe. Ha formado parte de la antología de terror, dirigida únicamente por mujeres, XX; pero aquí vamos a hablar de Sounthbound. Se trata de cinco historias, cada una de ellas dirigidas y escritas por diferentes personas, que tienen como hilo conductor una autopista solitaria. Benjamin se encarga de la segunda historia, Siren, que cuenta con un buen reparto y toma como referencia La matanza de Texas a la hora de mostrar a una familia muy poco cuerda.
Agnieszka Smoczy: The Lure (2019)
Cuando pensamos en las sirenas, rápidamente viene a nuestra mente el clásico de Walt Disney. Sin embargo, la mitología nos ha dejado claro que son criaturas bellas, pero muy peligrosas. Agnieszka Smoczy apuesta por seguir esta línea y abordar su siniestro origen. Golden y Silver son dos hermanas sirenas cuyos intereses toman direcciones distintas al entrar en contacto con humanos: una encuentra el amor, la otra quiere alimentarse de sangre e ir a América. Una mezcla entre el musical y el terror, pero con un resultado bastante efectivo.
Jen y Sylvia Soska: Rabid (2019)
Las hermanas Soska demostraron que eran expertas del body horror con su ópera prima, American Mary. Rabid es un remake visceral de la película de David Cronenberg de 1977. Aunque esto suponga todo un reto, las gemelas han sabido rendir homenaje al maestro del body horror por excelencia. Tras quedar desfigurada por un accidente, Rose se somete a un tratamiento experimental que la convierte en una mujer bella; sin embargo, pronto los efectos secundarios empezarán a florecer y traen consigo una sed insaciable de sangre.