A pesar de los inconvenientes que ha ido arrastrando desde hace meses, y una posible cancelación planteándose, la determinación del sector cultural y el acérrimo publico sevillano prevaleció, logrando que el Festival de Sevilla se celebre cuando le corresponde. Aunque de forma diferente, reducida, más acorde a una muestra de cine que a un certamen con veinte años a sus espaldas. Sea de la forma que sea, del 23 al 29 de noviembre, el cine europeo más destacado del 2023 deslumbrará en la capital andaluza con una programación de casi un centenar de películas. 🎬🌟
Nuestros compañeros Guillermo Rodríguez, Marina Selene Rojo y Francisco Sánchez serán los encargados este año de ver y reseñar las películas que desfilarán por las pantallas de los Cines Nervión Plaza de la ciudad hispalense.
SECCIÓN OFICIAL FESTIVAL DE SEVILLA 2022
- Robot Dreams (Pablo Berger, España)
¿Cuánto se puede llorar con un perro y un robot? Mucho, sí. Robot Dreams es una película encantadora. El director Pablo Berguer (‘Abracadabra’, ‘Blancanieves’), exprime las emociones del público sin pinitos, sin giros extremos, tan solo con unas intenciones claras, casi puras. Todo en la narración resulta simpático, desde los personajes hasta la música, tratada con exquisito cuidado; en más de una ocasión las escenas se dejan volar y rozan el musical. Tiene todo lo que una película de animación puede desear: sentimiento, arrojo, humor y, sobre todo, emoción.
Nota: 9/10
- La tierra prometida (Nikolaj Arcel, Dinamarca)
«Un capitán danés intenta poblar una tierra yerma y plantar una nueva planta que ha llegado al continente: la patata». Parece imposible que una premisa de este estilo contenga el arrojo suficiente (o, como dirían los americanos, the guts, «las tripas), para atrapar tanto a una sala de cine. Mad Mikkelsen («Drunk», «Hannibal») encarna al capitán Ludvig Kahlen en esta aventura monárquica. Kahlen quiere terraformar el páramo, una zona inhabitable donde todo el mundo sabe que no crece nada. Por el camino, se encontrará con el despiadado Frederik de Schinkel, el único gobernante de la zona, que quiere por todos los medios que Kahlen fracase en su cruzada personal de conquistar las tierras para dárselas al mismísmo rey.
Nota: 8/10
- La estrella azul (Javier Macipe; España-Argentina).
Una oleada de biopics han asolado el panorama audiovisual de los últimos años y parecía que La estrella azul se había sumado a esta tendencia con su particular contribución sobre la mítica figura del rock Mauricio Aznar, líder del grupo noventero Más Birras. Sin embargo, Javier Macipe presenta todo lo contrario en un largometraje que esencialmente rinde homenaje a las estrellas anónimas, todos aquellos artistas que renunciaron a la fama para mantenerse fieles a sus sueños.
El realizador aragonés captura con una sobresaliente honestidad el viaje que llevó a cabo este peculiar rockabilly a lo largo de las entrañas de Argentina, una odisea vital en la que reencontrarse consigo mismo y recobrar la vocación. El alma del rock y las chacareras se fusionan en este filme de tintes levemente documentales, lleno de decisiones originales y que deslumbra gracias a una voz propia sobresaliente. Los amantes de la música encontrarán un refugio asegurado bajo la sombra de Mauricio, pero cualquier espectador también tendrá la suerte de descubrir la tierna historia de un hombre que abandonó todo por mantenerse fiel a su esencia.
Nota: 8,5
- Felipe (Federico Schmukler; Argentina, España, Guatemala, México).
Felipe se ha convertido en la ópera prima seleccionada para dar el pistoletazo de salida a esta nueva edición del SEFF. Federico Schmukler se estrena en el largometraje con un coming of age que indaga sobre los altibajos vitales de un adolescente que se ve envuelto por la crisis argentina de 2001. En mitad del seno de una familia que se polariza progresivamente se encuentra Felipe (Felipe Szumik), un joven que únicamente sueña con huir de la realidad en un viaje que le obligará a desprenderse poco a poco de su inocencia.
El destino es caprichoso y ha querido que precisamente los agitados ecos sociopolíticos que envuelven la vida del protagonista se hayan repetido en este preciso momento en la actual situación de Argentina. La realidad traspasa la ficción y Schmukler ha revivido un conflicto que tiende puentes entre pasado y presente. El director argentino captura la pubertad, esa crisis emocional que choca de frente con la convulsa realidad, a través de un realización sencilla, directa y honesta que se aleja de cualquier floritura técnica y narrativa, lo que conforma un apropiado acierto. Es una pena que, a pesar de ello, Felipe se diluya sin pena ni gloria en la amplia corriente de filmes que se esfuerzan por contar historias similares y demasiado recurrentes en la gran pantalla.
Nota: 6,5
- El libro de las soluciones (Michel Gondry, Francia)
Nota:
- Las jaurías (Kamal Lazraq, Marruecos-Francia)
Nota:
SECCIÓN PANORAMA ANDALUZ
- Una noche con Adela (Hugo Ruiz, España)
Nota:
- Liuben (Venci Kostov; España-Bulgaria).
Venci Kostov debuta en la gran pantalla con Liuben, largometraje con el que se nutre de sus orígenes para orquestar un melodrama social de tintes trágicos que toma como escenario a la Bulgaria más profunda. El director hispano-búlgaro perfila la relación entre Víctor (Dimitar Nikolov) y Liuben (Bojidar Iankov Asenov), un migrante que retorna a su tierra natal después de varios años fuera y un joven romaní que malvive en el orfanato de la zona. Ambos conectan en una compleja y críptica relación bajo la que subyacen en el fondo múltiples cuestiones como el desarraigo, la marginación y las lacras sociales de un país que se mantiene anclado en un sistema social y moral arcaico.
Liuben comienza siendo una historia comedida de carácter intimista y que profundiza a fuego lento en el mundo interior de sus protagonistas a la que le va ganando terreno poco a poco la tragedia. Se confecciona una ópera prima llena de buenas ideas y que, por encima de todo, toma consciencia de las problemáticas actuales que amenazan la realidad europea, particularmente en relación con las crisis identitarias y la intolerancia.
Nota: 6,5
- Sueños y pan (Luis “Soto” Muñoz; España).
La película ganadora de la Sección Oficial Nacional en el Atlántida Mallorca Film Festival aterriza con fuerza en Sevilla. La escasez de medios y financiación no impidió que un jovencísimo grupo de amantes del cine liderados por el cineasta Luis “Soto” Muñoz crearan Sueños y pan, filme con una de las voces noveles más particulares del cine español.
Un relato redondo sigue las desventuras de Javi y Dani, dos chicos que malviven en la periferia madrileña y que un día deciden robar un prestigioso cuadro que trastocará el rumbo de sus desdichados días. Sueños y pan perfila el retrato de una juventud asolada por la precariedad en un homenaje en blanco y negro al cine quinqui español. Una serie de ideas originales, arriesgadas y poco vistas hablan con madurez de temas como la amistad, la familia o la miseria generacional. Quizá la falta de experiencia, especialmente en la dirección actoral, aflora a momentos, pero no termina de eclipsar a uno de los trabajos más interesantes de la sección.
Nota: 7,5
SECCIÓN SELECCIÓN EFA
- How to have sex (Molly Manning Walker, Reino Unido)
Nota:
- La quimera (Alice Rohrwacher; Italia, Francia, Suiza).
Una de las voces más interesantes del cine italiano regresa tras el éxito de Lazzaro feliz (2018) e irrumpe en la sección EFA del festival con una fábula poética y reivindicativa que nos traslada a la costa del Tirrineo en los setenta a través de los ojos de los singulares «tombaroli». Un arqueólogo inglés (Josh O’Connor) hace uso de un don especial con el que ve aquello que los ojos no pueden y siente lo que el corazón ignora para liderar a un grupo de alocados saqueadores de tumbas que revenden las reliquias etruscas que se topan en su camino.
Predomina en La quimera el retrato de la psique del desafortunado, almas que divagan en una busca insaciable de sus particulares quimeras: dinero, amor o la muerte. Con ellos, Rohrwacher retoma la batuta como heredera del neorrealismo y confabula un filme poético que navega entre contrastes: lo real y lo onírico; lo permanente y lo efímero, lo público y lo privado; a través de un ejercicio cinematográfico lírico remarcable en el que cada plano queda impregnado en la retina del espectador.
Nota: 9