Fernando Franco: «Los cuerpos normativos son los que más complejos encierran.»

El nombre de la nueva película de Fernando Franco puede confundirse. Y me consta que no son pocos a los que les ha pasado. La cuestión es que recibe el mismo título que la obra del compositor musical Ígor Stravinski: La consagración de la primavera.

Tras su paso por la sección oficial del festival de San Sebastián esta semana llega a salas la tercera película del director sevillano Fernando Franco. Una cinta cargada de sencillez, misterio y con un trasfondo tan controvertido como necesario: la sexualidad en las personas con discapacidad.

La consagración de la primavera presenta a la joven actriz Valeria Sorolla y al actor vasco Telmo Irureta, ambos debutantes dando vida a los protagonistas del largometraje. La primera en plena descubierta de su sexualidad adolescente, el segundo con la necesidad de resolver sus deseos sexuales pese a su discapacidad. Y son esas inquietudes las que los harán juntarse y descubrirse.

Hablamos con Fernando Franco de ese tema tabú como puede ser la sexualidad y de alguna que otra cuestión más.

Me atrevería a decir que muy poca gente se pregunta sobre la sexualidad de las personas con discapacidad, ¿es el cine el mejor medio para dar voz a ello?

Justo ese hecho me atrae hacia el proyecto. La sexualidad en las personas discapacitadas es un tema tan presente como desconocido. Yo no lo conocía y a partir de ahí indagué y descubrí información en un proceso de documentación muy largo. Pero, sin duda, fue gratificante y apasionante. Incluso hice un curso de afección sexual.

No solo habla de eso sino que lo envuelve de un joven personaje femenino en busca de su nacer sexual…

No quería hacer una película monotemática. Me pareció importante contrarrestar la sexualidad de David, el personaje de Telmo con parálisis cerebral, con la de una chica aparentemente normal y sin prejuicios. Creemos que el discapacitado es el que más necesita de nuestra ayuda pero realmente es el que mejor se conoce. Son los cuerpos normativos los que más complejos encierran. El personaje de Laura, la joven universitaria, es la manera en que todos nos podemos sentir identificados en la película. Todos tenemos complejos e inseguridades y a medida que avanza el largometraje se van destapando.

Y ambos terminan conociéndose a la perfección. 

El equilibrio entre los dos personajes era esencial. Poco a poco ella va introduciéndose tanto física como emocionalmente en el espacio de él hasta que llegan a intimar. Al fin y al cabo la película trata sobre la intimidad. 

Hay cierto componente religioso que envuelve sutilmente la película, ¿siempre oponemos la religión al sexo?

El prejuicio que tenemos sobre el sexo tiene que ver con la cultura que hemos recibido. En mi caso, estudié en un colegio jesuita y es inevitable que la película no tenga algo de eso. 

La Consagración de la Primavera es el título de la composición musical de Ígor Stravinski. Cuando se estrenó en 1913 la tildaron de vanguardista para la época y todavía sigue considerándose así, ¿qué relación tiene con el título de su película?

Me interesa la transgresión. La película no es transgresora en su totalidad pero si es cierto que al hablar de la sexualidad en las personas discapacitadas le da un punto fuera de lo común que puede conectar con ese significado de la obra de Stravinski. Además de su significado del nacer sexual de la protagonista.