Título original: The Rhythm section
Año: 2020
Duración:109 min.
País: Reino Unido
Dirección: Reed Morano
Guion: Mark Burnell
Música: Steve Mazzaro
Fotografía: Sean Bobbitt
Reparto: Blake Lively, Sterling K. Brown, Max Casella, Richard Brake, Daniel Mays, Geoff Bell y Jude Law
Productora: Babieka, Eon Productions, IM Global, Ingenious Media, Whitebeard Films
Género: Acción, thriller
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Sigue la acertada (y algo desesperada) campaña en busca de heroínas de acción dignas de la admiración incondicional del gran público. Para compensar las décadas en las que la mujer se ha visto relegada a un segundo plano en este tipo de producciones, la maquinaria cinematográfica anglosajona está buscando exhaustivamente la forma de dar con personajes femeninos (violentamente) empoderados que calen en las masas y se unan al imaginario colectivo de los espectadores. El ritmo de la venganza fracasa estrepitosamente en este cometido, presentando una historia mediocre con un personaje protagonista condenado a la irrelevancia. Si bien la cabeza de cartel, Blake Lively, está correcta llevando a término su insulso alter ego, esta película, en apenas unas semanas, no será recordada por absolutamente nadie.
Tratando de emular fórmulas ampliamente practicadas (y exitosas) como las de Neeson–Collet Serra, esta cinta intenta de forma obstinada pero pobre construir un clima de tensión frenética. Sin embargo, una estructura inentendible ,que se compone principalmente de bandazos argumentales, y unos secundarios insulsos y muy desaprovechados terminan lapidando los discretos encantos de esta película. Si bien no deja de tener su gracia ver a un Jude Law alopécico, es doloroso observar cómo los guionistas han desperdiciado el talento de este gran actor relegando a su personaje a un manido y antipático puñado de tópicos sobre espías.
La trama, teniendo pretensión continua de ser sorpresiva, es una ristra de carencias, acontecimientos inanes, bandazos argumentales y giros ampliamente previsibles. El final ,o pobre trasunto de Sospechosos habituales, resulta demasiado fácil de anticipar. El ritmo de la venganza, es en definitiva un proyecto esencialmente neutro que, si bien tiene pasajes razonablemente entretenidos, está destinado a caer en el doloroso olvido.
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Lo mejor: Lo en serio que se toma Blake Lively su trabajo
Lo peor: Es una película mediocre en todos los aspectos
Nota: 5/10