‘El misterio del dragón’, cuatro paredes verdes

Título original: Journey to China: The Mistery of the Iron Mask

Año: 2019

Duración: 120 min.

País: Rusia, China

Dirección: Oleg Stepchenko

Guion: Dmitry Paltsev, Oleg Stepchenko y Aleksey Petrukhin

Música: Aleksandra Maghakyan

Fotografía: Ivan Gudkov y Man-Ching Ng

Reparto: Jason Flemyng, Anna Churina, Xingtong Yao, Rutger Hauer, Charles Dance y Arnold Schwarzenegger

Productora: Buffalo 8 Productions (post-production services), China Film Group Corporation (CFGC), China International Picture, Fetisoff Illusion, GFA Entertainment, Sparkle Roll Media, Russian Film Group Corporation

Género: Acción, aventuras, fantasía

Ficha en IMDb

Es la segunda vez que los maestros Jackie Chan y Arnold Schawrzenegger se juntan en la gran pantalla. La primera fue en la infravalorada y verniana La vuelta al mundo en 80 días (Frank Coraci, 2004), título del que mi niño interior sigue siendo fiel devoto. Lamentablemente, a esta segunda colaboración le falta el encanto de la primera. Si bien es cierto que en El misterio del dragón hay someros guiños divertidos, el conjunto de la cinta es un proyecto fallido.

Exceptuando unos efectos especiales notables y una música sobrecogedora, esta película flaquea en casi todas las áreas. El guion es una esperpéntica ristra de frases aleatorias e inconexas, el exasperante histrionismo de algunos actores llega sin problemas al ridículo y algunos fragmentos parecen una copia pobre, fea y cutre de Piratas del Caribe.

Yo me considero un espectador agradecido y más que indulgente. Soy un amante del cine de género y de la Serie B, y como tal, he aprendido a desarrollar una gran capacidad para abstraerme de la mediocridad en aras de contemplar el conjunto. No obstante, cuando un amante del cine underground perdona o incluso disfruta un guion endeble, espera de la película unos ciertos requisitos estéticos, sello de identidad del subgénero. Otras obras recientes del género supieron entender esta dicotomía y cumplieron con creces estos arquetipos estéticos, como es el caso de El reino prohibido (Rob Minkoff, 2008). El misterio del dragón falla incluso en este aspecto, pues presenta una estética ingenua y wannabe fruto de una parca autoconciencia, lo que me hace sospechar que esta película se toma demasiado en serio a sí misma.

Lamento no haber podido disfrutar con este visionado, pues créanme cuando les digo que a mi me encanta que me gusten las películas. No obstante, encuentro pocos elementos rescatables en esta descabezada cinta. El único misterio aquí, es cómo convencieron a Chan, Schwarzenegger, Jason Flemyng, Charles Dance y Rutger Hauer para trabajar en este película.

Lo mejor: La (breve) pelea entre Jackie Chan y Arnold Scharzenegger.

Lo peor: Las cotas de ridiculez (¿involuntaria?) que alcanza.

Nota: 4/10