un bocado exquisito

Crítica – ‘Un bocado exquisito’

Título original: Smagen af sult aka 

Año: 2021

Duración: 104 min.

País: Dinamarca

Dirección: Christoffer Boe

Guion: Christoffer Boe, Tobias Lindholm

Fotografía: Manuel Alberto Claro

Reparto:Katrine GreisRosenthal, Nikolaj CosterWaldau, Flora Augusta, Charlie Gustafsson, August Vinkel, Nicolas Bro, MajBritt Mathiesen, Kent Dahlgren, Rasmus Hammerich, Luise Skov, Luca Reichardt Ben Coker, Sofie Torp, Michael Brostrup,

Productora Coproducción: Dinamarca-Suecia; Zentropa

Género: Romance. Drama | Drama romántico. Cocina

Ficha en Filmaffinity

Una persona que se quiere dedicar a la cocina tiene que cumplir con tres características. Tiene que ser: “delicada, atenta y apasionada”. Y eso mismo es lo que demuestra Christoffer Boe en su última película; Un bocado exquisito.

Junto con el guionista de Otra Ronda (Vinterberg, 2020) y La Caza (Vinterberg, 2012), el director consigue acercarnos las consecuencias que conlleva perseguir los sueños de una vida a toda costa, en este caso tenemos a un matrimonio obsesionado porque les den una Estrella Michelin.

Exigencia, determinación, principios culinarios y pocos escrúpulos morales pueblan una trama en la que lo profesional acaba imponiéndose ante lo personal.

Una estructura dividida en cinco capítulos que orquestan la vida de esta pareja y que se superponen de forma maestra para que al final del film todos los sabores y texturas cuadren y tengamos así el verdadero bocado exquisito.

Crítica Un Bocado Exquisito
Padre e hija en la ficción cocinando

Mientras los protagonistas catan y prueban sus creaciones, nosotros lo apreciamos a través de una cámara que se mueve sutil y que no regala ningún plano sin una interpretación crucial del mismo para la trama. Además de la fotografía, si bien el plato estrella de la carta son ostras con limones fermentados, nuestra mirada se desliza por la película a través de tonalidades frías y cálidas llevadas al puro extremo y reforzadas con neón.

Una historia de ambición y perseverancia que finalmente alecciona tanto a los personajes como al espectador y es que a veces el mejor regalo que podemos hacer tanto en lo culinario como en lo cinematográfico es darles a los comensales, al público algo sencillo y rico con lo que disfrutar y crear buena conversación.

Lo mejor: La interpretación de la hija, Flora Augusta de tan solo 10 años hace un trabajo que se sale de la pantalla.

Lo peor: Cuesta entrar en la trama y seguir el ritmo

Nota: 6´5/10

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