Título original: The dead don’t die
Año: 2019
Duración: 103 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Jim Jarmusch
Guion: Jim Jarmusch
Fotografía: Alex García
Reparto: Bill Murray, Adam Driver, Tilda Swinton, Chloë Sevigny, Steve Buscemi, Danny Glover, Caleb Landry Jones, Rosie Pérez, Iggy Pop, Sarah Driver, RZA, Selena Gomez, Carol Kane, Tom Waits, Austin Butler, Luka Sabbat, Sturgill Simpson, Alyssa Maria App, Sid O’Connell, Kevin McCormick, Justin Clarke, Vinnie Velez, Lorenzo Beronilla, Talha Khan, Mick Coleman
Productora: Animal Kingdom
Género: Comedia. Terror. Zombies
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El humor del absurdo llega para quedarse este 2019 en el que Jim Jarmusch (Paterson) aporta su granito de arena con Los muertos no mueren, comedia absurda que mezcla el cine de terror de culto de los zombies con toda clase de clichés de ambos géneros. Desde el inicio de la película, Jarmusch deja claro que su esta existe con el único propósito de entretener y pasarlo bien tanto fuera de guion como dentro.
Los muertos no mueren es una película coral llena de actores de renombre que comienza con una presentación del lugar en el que transcurre todo, la situación del planeta en la actualidad y alguna que otra frase clave para posicionar a sus personajes. El humor sobre política, autocrítica y clichés llena esta historia sin forzar ninguna situación más allá de probar hasta qué punto del absurdo es capaz de llegar el guion por sí solo. Sin dejar ni una sola escena sin referencias al cine de terror en general, con especial hincapié en el subgénero de los muertos vivientes, aunque sin llegar a aportarle nada nuevo o destacable a este.
A pesar de tener un reparto de peso e importancia en todos los personajes, Bill Murray y Adam Driver (Star Wars: Los últimos Jedi) lideran el curso de la película. Convirtiéndola irremediablemente en una buddy movie, donde una vez más son dos hombres (policías en este caso) los que llevan a cabo el intento de enfrentamiento, con mejor o peor resultado, a la invasión de zombies. Jarmusch no parece haberse esforzado si quiera en intentar darle a sus personajes femeninos una personalidad algo más allá de la mujer tonta, «la tía buena» y la «femme fatale«, a las que podría haber sacado muchísimo más partido y quizás aprovechado para hacer destacar su película en algo más allá de unas risas.
Sin poder apartar ni un segundo de la pantalla el mensaje sobre el cambio climático y lo rápido que el ser humano está destruyendo el planeta, Los muertos no mueren presenta un apocalipsis zombie en el mundo actual. Donde todo el mundo conoce los puntos claves del género y en el que sus tópicos forman parte del día a día del espectador. El film goza de un humor con el que resulta fácil conectar, pero que depende demasiado del estado de ánimo del espectador para poder hacer mella en este. Jarmusch presenta una historia nada presuntuosa que no va mucho más allá de pasar un buen pero insulso rato frente a la gran pantalla.
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Lo mejor: La locura y el absurdo al que llega sin dejar a un lado la clara crítica al ser humano.
Lo peor: Pasa completamente desapercibida en el mundo de los muertos vivientes.
Nota: 7/10