Título original: Birds of Prey (And the Fantabulous Emancipation of One Harley Quinn)
Año: 2020
Duración: 109 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Cathy Yan
Guion: Chuck Dixon, Jordan B. Gorfinkel, Christina Hodson (Cómic: Greg Land)
Música: Daniel Pemberton
Fotografía: Matthew Libatique
Reparto: Margot Robbie, Mary Elizabeth Winstead, Ewan McGregor, Jurnee Smollett-Bell, Rosie Pérez, Chris Messina
Productora: DC Entertainment
Género: Acción
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En un mundo donde el cine está completamente dominado por Marvel y su factoría dorada, DC todavía no ha llegado a hacerse un hueco real en el mundo de los superhéroes. Por supuesto que sus personajes son tanto o incluso más famosos que los del hijo predilecto de Disney, pero aún así el apoyo de público y crítica sigue siendo desigual, imprevisible y caprichoso. Con el tiempo DC ha aprendido que, universos compartidos y cronologías aparte, su estrategia debe diferenciarse de la de su mayor competidor. Su última película, en la cual se han preocupado más por mantener su espíritu individual que por el valor del universo extendido, llega este fin de semana a las pantallas. Aves de presa (y la fantabulosa emancipación de Harley Quinn) es una propuesta fresca, cuidada y muy necesaria que hace justicia a un personaje que venía pidiéndolo desde hacía ya tiempo.
Cuando Margot Robbie se convirtió en la «robaescenas» oficial de Escuadrón Suicida (David Ayer, 2016) era de esperar que Warner intentase sacar tajada del asunto dándole rápidamente una película propia. Aunque en un principio este spin off iba a ser Gotham City Sirens, finalmente Aves de presa acabó por llevarse el papel de ser “la película de Harley”. Sin embargo, estamos ante algo más que eso, porque Harley aquí no está sola y, de hecho, aunque no le haga falta en realidad funciona mejor en compañía. A pesar de su carisma y soltura, la antiheroína preferida de DC se come de verdad la pantalla cuando la juntas con el personal adecuado. En esta ocasión, y tras ser abandonada definitivamente por el Joker, Harley acaba reuniéndose de las formas más aleatorias posibles con Cazadora, Canario Negro y Renée Montoya, todo esto para salvar de las garras a una huérfana medio cleptómana, Cassandra Cain, de las garras de Máscara Negra (Ewan McGregor).
La cinta es de principio a fin un festival de violencia, mucho color y grandes dosis de sororidad. Desde la perspectiva de Harley como narradora, la trama es contada como si ésta estuviese intentando recordar cada una de las cosas que le llevaron a acabar con estas otras cuatro mujeres. Una decisión acertadísima que sorprendentemente dota a la película de un gran ritmo y dinamismo, desvelando poco a poco las razones por las que sus cinco protagonistas no podían enfrentar solas esta guerra. Tan empoderante como divertida y vibrante, Aves de presa se convierte en una de las mejores cintas de un DC que está sabiendo mover muy bien sus cartas cuando de directoras y protagonistas femeninas se trata.
Aves de presa puede pecar de demasiado gratuitamente violenta y explícita, pero en sus mejores, su brillante dirección llena de aciertos visuales la convierten en un grandísimo blockbuster que trata muy bien los tres pilares sobre los que sustenta su moraleja: los peligros de la masculinad tóxica (el verdadero enemigo en esta historia), las ventajas de la sororidad (la mejor arma contra el patriarcado) y la búsqueda del verdadero yo. Como bien dice su subtítulo, Harley Quinn ha venido a emanciparse, a hacerse nota y a convertirse en algo más grande si cabe que el Joker. Porque estamos en un momento en que la enorme sombra del patriarcado sigue devorando al cine de superhérores pero solo es cuestión de tiempo que todas las mujeres que un día tuvieron que limitarse a ser el interés amoroso, la villana de turno o la chica que necesitaba ser salvada logren colocarse, por fin y al igual que Harley, en el preciado centro de la historia.
Lo mejor: Su frescura y su mensaje, además de una Margot Robbie que de nuevo borda cada escena.
Lo peor: Puede pecar de darlo todo demasiado claro y explícito.
Nota: 9/10.