Ya es un clásico en esta web la cobertura del Festival de Cine Fantástico y de Terror de Sitges. Un año más volvemos a la ciudad costera catalana para disfrutar de la cita anual junto a los nuevos talentos del género.
Durante los próximos días del Sitges 53, este artículo se irá actualizando llenándose de reseñas y opiniones de todos los largometrajes que nuestro acreditado Pablo Aguilar-Galindo vea. Una semana en la que el cine de género será el protagonista y en la que nosotros deseamos disfrutar como niños pequeños. A continuación tenéis disponibles todas las películas que incluimos en nuestra cobertura.
SECCIÓN OFICIAL SITGES 53
- Malnazidos, de Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro
Es la inauguración que Sitges merece en un año como este. No solo por inaugurar el festival en medio de una pandemia mundial, si no por reafirmar que el cine español sigue en forma. Y me atrevería a afirmar que Javier Ruiz Caldera se proclama líder indiscutible dirigiendo superproducciones nacionales. Malnazidos no es menos y, pese a ser un largometraje destinado al gran público, consigue hacer vibrar al espectador con sus apabullantes efectos y escenas de acción. Quizás a la historia no se le puede buscar justificación, pero usa el fantástico inteligentemente mezclado con pequeñas dosis de humor. Todo en su justa medida hace disfrutar de una película que divierte y fantasea con una Guerra Civil en la que los protagonistas podrían haber sido los zombies.
Lo Mejor: Su ingeniosa combinación entre historia y ciencia ficción.
Lo Peor: Que la tachen de comedia barata.
Nota: 6/10
- Península, de Yeon Sang-ho
Una “península” post-apocalíptica en la que un virus ha convertido a los supervivientes en zombies. Si piensa en la actualidad, cualquier parecido es pura coincidencia. El director de Train to Busan, que ya conquistó Sitges en 2016 con el premio a mejor director y efectos especiales, vuelve con una segunda parte con los zombies como protagonistas. El largometraje es, cuanto menos, espectacular en su artillería de efectos digitales. Y me sorprende el realismo que desprenden la totalidad del elenco de la película, unas interpretaciones que transmiten verdad que poco se suelen ver en películas de este calibre.
Lo mejor: Sus interpretaciones.
Lo peor: Que no vaya más allá de (sobrevivir a) una aventura zombie.
Nota: 6/10
- Mandibules, de Quentin Dupieux
Dupieux siempre alegra y provoca carcajadas con sus hilarantes historias. Ya lo hizo en 2018 con Au Poste! y esta vez vuelve con una surrealista historia entre amigos y mascotas. El director francés sabe construir unos personajes anecdóticos que conducen la película hacía un terreno absurdo. El espectador se sumerge de lleno y participa en las patéticas situaciones. Muy acertado el reparto y su química. Para no perdérsela.
Lo Mejor: Un surrealismo que atrapa por su inocencia.
Lo Peor: Que se le clasifique de género.
Nota: 8/10
- L’état sauvage, de David Perrault
No hay conflicto aparente y los personajes divagan en un continuo parloteo y baile de etiqueta en mitad del siglo XX. No consigo entrar en la película y, además, se me hace terriblemente aburrida. Su indecisión y no avance ayudan a ese efecto de lentitud. Lástima porque el diseño de producción está magníficamente bien trabajado y categorizan al filme como algo que podría llegar a ser; pero no es.
Lo mejor: Su cuidada imagen.
Lo peor: Que la película no te deje absorber.
Nota: 2/10
- La nuée, de Just Philippot
Tiene el tono que Sitges reclama a sus películas, pero me deja indiferente. El conflicto que plantea el espectador llegará a resolverlo entrado el segundo acto; a partir de ahí el largometraje divaga por senderos de un misterio que ya conocemos. Un filme que tarda en resolverse debido a su elongación narrativa (casi inexistente). Podría haber visto la misma historia en un cortometraje.
Lo mejor: Sus originales protagonistas.
Lo peor: Tratar de esconder durante 90 minutos el misterio inexistente.
Nota: 5/10
- Mosquito state, de Filip Jan Rymsza
Tengo la sensación que la película me cuenta el carácter y la manera de ser de un personaje más que una historia. Mosquito State es repetitiva y con actuaciones que deambulan. Me cuesta ver dónde está el fantástico más allá del uso del mosquito como animal de compañía doméstico (si es que se puede denominar así). Una lástima que no llegue a más, su premisa me creaba expectativas.
Lo mejor: Esa sensación de repugnancia que crea.
Lo peor: Que desaproveche un potente detonante como el mosquito.
Nota: 5/10
SECCIÓN OFICIAL SITGES 53 – SESIONES ESPECIALES
- No matarás, de David Victori
No te fíes de la historia romántica de la que sospechas al inicio, pues rápidamente se convierte en una salvajada. Un largometraje que se cocina a fuego lento mientras el espectador desciende lentamente a los infiernos más profundos. Las acertadas elecciones técnicas convierten la película en una experiencia inmersiva protagonizado por un Mario Casas en continuo crescendo que convence. Incluso me atrevo a decir que es su mejor interpretación hasta la fecha. David Victori convierte una historia tan sencilla como un lío de una noche en un largometraje nada costumbrista y con sello propio.
Entrevista David Victori y Mario Casas.
Lo mejor: El continuo aumento de la tensión.
Lo peor: Un inicio pretencioso.
Nota: 8/10
- 30 monedas, de Álex de la Iglesia
Da igual que sea en cine o haciendo series, el maestro Álex de la Iglesia está en plena forma y ’30 monedas’ es una muestra más de su tremendo talento. Con la premisa básica de situaciones paranormales en un pueblo rural, el director vasco saca lo peor de cada personaje en un festín donde no faltan monstruos y exorcismos. Con un ritmo frenético y una acción apabullante la serie promete ser toda una delicia por devorar.
Lo mejor: Una serie de género que huye de tópicos.
Lo peor: Que debamos esperar hasta su estreno en noviembre.
Nota: 8/10
NOVES VISIONS SITGES 53
- Ich-Chi, de Kostas Marsaan
Se mueve por el terror clásico con una historia que narra un ritual de un antiguo pueblo. Está bien rodada y tiene ideas interesantes de planificación que ayudan a la percepción sensorial del metraje. Maneja bien la intriga y se nos presenta como una película ancestral con interpretaciones que no dejan indiferentes. Todo un descubrimiento.
Lo mejor: Destaca dentro de una terror tan clásico.
Lo peor: Que pase desapercibida en el festival.
Nota: 7/10
- Un efecto óptico, de Juan Cavestany
La premisa que presenta, cuanto menos, es interesante. Consigue que el espectador se sumerja en ese bucle temporal que expone y quede abducido durante los ochenta minutos de metraje. No se puede explicar ni la película ni su historia, es algo tan surrealista que la convierten en una extrañeza divertida. Recomendable filme que huye de los estereotipos de la industria y camina libre, sin tapujos ni complejos.
Lo mejor: Su sinsentido genera ansias de saber y conocer.
Lo peor: Que el espectador desista por no entenderla.
Nota: 7/10