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Fernando González Molina: «El fantástico es un género muy difícil de atacar si no le dedicas el tiempo adecuado.»

Fernando González Molina es uno de los directores más activos y versátiles del cine español en los últimos años. Su carrera está repleta de proyectos como Fuga de cerebros (2009), Tres metros sobre el cielo (2010), o Palmeras en la nieve (2015). Además, su reciente trabajo en la adaptación de la Trilogía del Baztán (2017-2020) ha demostrado su capacidad para llevar a la gran pantalla historias complejas y atmosféricas con el respaldo de crítica y público.

Ya consolidado como director de largometrajes, en 2021 González Molina decidió embarcarse con un nuevo proyecto, Paraíso, una serie producida por MovistarPlus+ que ha logrado destacar como una de las producciones más llamativas de la plataforma. El realizador no es ajeno al género ni al formato. Entre 2011 y 2013, participó en El barco y Luna, el misterio de Calenda, dos ficciones de Atresmedia que, al igual que Paraíso, están llenas de misterio, suspense y acción.

Con la llegada de la nueva temporada de Paraíso, Fernando González Molina nos comparte en esta entrevista su experiencia durante el rodaje y algunos detalles sobre lo que podemos esperar como espectadores.

PREGUNTA: ¿Por qué Paraíso cambia en esta segunda temporada a un tono más oscuro teniendo en cuenta que es un producto dirigido a todos los públicos?

FERNANDO GONZÁLEZ MOLINA: Bueno, es verdad que la segunda temporada de Paraíso tiene algo más de oscuridad. Es más juguetona. Pero sin abandonar su carácter lúdico de gran historia de aventura. Nos daba la sensación que, al crecer los personajes, al haber pasado tres años y cumplir 18 años, de alguna manera maduraban. Y nosotros madurábamos con ellos. Incluso los que son fantasmas también maduraban gracias a19 sus experiencias. Nos encontramos personajes que han superado un trauma, que han pasado unas circunstancias muy extremas y eso hacia que fueran mas adultos. Convirtiéndose la serie con ello en más adulta.

Y luego pensamos también que, todas esas grandes sagas que nos encantan, Star Wars, Harry Potter…, empiezan siendo ‘juveniles’, con elementos infantiles. Y luego de repente se van oscureciendo. El segundo capítulo trata siempre la crisis del héroe o la heroína, la oscuridad es mayor, la amenaza más peligrosa…Nos gustaba mucho jugar con eso. Que en Paraíso la oscuridad fuera avanzando, pero que el espectador tuviese la sensación que todo acabaría bien.

PREGUNTA: ¿Teníais desde el principio planteada la serie para que durase unas dos temporadas?

FGM: Teníamos muy claro que la historia se contaría en tres bloques. Una primera parte que sería la primera temporada, y luego virar hacia un viaje a la oscuridad. Digamos que del primer capítulo al quinto de la segunda temporada corresponde al segundo bloque, y del sexto al octavo al tercero.

Siempre hemos tenido claro como iba a ser el final. Después de hablar con Movistar decidimos hacer estos ocho capítulos para cerrar el viaje y destinar todo el presupuesto con el que contábamos para hacerlo.

P: ¿Cómo reacción esperas de los espectadores ante estos nuevos capítulos?

R: Básicamente, que los disfruten. Ya lo pretendimos en la primera temporada, pero ahora con la segunda lo buscamos de forma más intensa. Generar una historia, un producto que sea profundamente entretenido, que atrape al espectador, le divierta, le engañe, le emocione y le sorprenda. Que no sepa nunca donde acaba el viaje que le presentamos. A mi me encantan ese tipo de ficciones que juegan contigo y provocan no poder dejar de ver un capitulo tras de otro.

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Gonzalez Molina, junto con los cuatro jóvenes protagonistas de ‘Paraíso’ (Foto: Movistar+)

P: Cabe destacar que los efectos especiales han cobrado un también papel mucho más importante…

FGM: Para nosotros los primeros siete capítulos fueron como un laboratorio de pruebas. Hasta entonces solo había trabajado los efectos visuales de Palmeras en la nieve o El guardián invisible, algo verosímil. Pero nunca en un producto de género fantástico o ciencia ficción. No inventando mundos. Y aquí hemos dado ese salto, tras la primera temporada, con ensayos y errores. Hemos aprendido a mejorar cosas de manera muy notoria, también porque hemos tenido más tiempo y más dinero. Paraíso es quizás, la primera serie española en el que el fantástico se pone en el centro y no hay complejos a la hora de afrontar el género desde los efectos visuales.

P: ¿Piensas que con Paraíso has podido sentar precedente e iniciar una nueva ola de series fantásticas dentro de la industria española?

FGM: Sentar precedente significa provocar un cambio y mejorar las cosas. Y en ese sentido creo que hemos abierto un caminito para que los productores y directores españoles no tengan miedo a contar historias como esta. También hemos tenido la enorme suerte contar con mucho apoyo y tiempo para escribir los guiones. El fantástico es un género muy difícil de atacar si no le dedicas el tiempo adecuado.

P: Esta temporada se puede notar que los personajes femeninos han cobrado mucha importancia. Especialmente, Olivia, una de las chicas protagonistas.

FGM: Siempre hemos querido hacer una serie profundamente diversa en cuanto a los personajes protagonistas. Que hubiera representación de hombres y mujeres fuertes, con diversas orientaciones. Pero es verdad que, con Ruth García, la cocreadora, había mucha obsesión con que hubiera mujeres poderosas al frente. Incluso en el lado de los villanos. Es un elemento definitorio de la serie y que nos importaba mucho.

Olivia es un personaje que amamos profundamente porque retiene en si misma todo el ADN de Paraíso. Lo lúdico, lo oscuro, lo luminoso, lo emocional…todo. Es un personaje con el que se puede seguir la historia, con el que puedes viajar. Un personaje interesante, valiente, leal, divertido…Por eso ha adquirido mucho peso en esta temporada.

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Pau Gimeno dirigido por Fernando González Molina en el rodaje de ‘Paraíso’ (Foto: Movistar+)

P: ¿Hay posibilidad de continuar la historia de Paraíso más allá de esta segunda temporada?

FGM: Ojalá, porque es un universo lo suficientemente rico, extenso y completo como para abordarlo con nuevas historias y de varias maneras. Ya sea con spin-offs, películas… Es parte de su encanto, ahí ya el publico mandará. La historia de Paraíso como tal termina en este capítulo final. Pero la televisión es mágica. Y ahora, se están haciendo reboots o continuaciones de series diez años después de ofrecérsela al público.

P: ¿Qué cosas has podido aprender del rodaje de Paraíso?

FGM: A ir más allá. Siempre cada proyecto que afronto trato que sea distinto. Que me suponga un desafío. Que tenga riesgos. Hasta Paraíso nunca había hecho fantástico hasta ahora. Imagina hacer quince capítulos de una serie desde su creación, la producción ejecutiva…el viaje ha sido muy intenso. Enfrentarme a tipos de trama e historias a las que no estoy habituado. Es difícil contar una historia en la que tengas que invéntate un universo y sus reglas.

P: Ahora que has acabado Paraíso, ¿tienes alguna otra serie, película o proyecto entre manos?

FGM: Ahora mismo lo que quiero es descansar un poco, estrenar la serie y disfrutar. Y francamente me aparece hacer una película el año que viene. Es verdad que la taquilla está muy complicada. Pero para los que como yo le debemos tanto al cine, no podemos abandonarlo.

P: ¿Qué consejo les podrías dar a algún@ joven que esté empezando en el mundo audiovisual?

FGM: Que tenga fe. Que no desfallezca ante el primer improvisto. Los caminos son muchos y variados. Si tienes sueños, y respetas este mundo de contar historias, insiste y pelea. Al final, esto es un poco de talento, un poco de suerte, y mucho de constancia.