Título original: Van Gogh: Tra il grano e il cielo
Año: 2018
Duración: 70 min
País: Italia
Dirección: Giovanni Piscaglia
Guion: Matteo Moneta
Música: Remo Anzovino
Fotografía: Lorenzo Giromini
Reparto: Valeria Bruni Tedeschi, Marco Goldin, Eva Rovers
Productoras: 3d Produzioni srl / Nexo Digital
Género:Documental, arte, pintura
Fecha de estreno: 25 de febrero de 2019 (España)
El año pasado Loving Vincent conquistó el cine de animación con el ambicioso proyecto sobre la vida del autor contada con más de 55.000 fotogramas compuestos por pinturas al óleo. En la nueva película sobre el pintor, Willem Dafoe interpreta a este en Van Gogh, a las puertas de la eternidad, que próximamente se estrenará en España. Pero la representación de la vida del autor va más allá, colándose esta vez en el género del documental. Giovanni Piscaglia presenta en salas su primer documental: Van Gogh de los campos de trigo bajo los cielos nocturnos. En él, el director muestra la colección del mayor admirador del pintor, Helene Kröller-Müller.
La coleccionista privada construyó el Museo Kröller-Müller, tras la compra de casi 300 obras de Van Gogh. Desde que llegó a sus manos la primera obra del autor, Helene sintió una conexión mayor que la propia admiración que podría sentir cualquier persona. Helene se sentía completamente conectada y embelesada por el artista, llegando a sentir una unión espiritual. Giovanni Piscaglia utiliza esta unión y amor de Helene, para presentar la vida del pintor como nunca antes se había mostrado, a través de los ojos de su mayor admiradora. Conectando los verdaderos escenarios de la vida del artista en Arlés con lo que representaba de los mismo en sus obras. El documental consigue que el espectador llegue a sentir la viveza de las obras, disfrutando de los mismos cielos y respirando el fresco olor a trigo.
Por medio de una guía didáctica sobre las distintas etapas del artista en la pintura, el director consigue trazar una línea fácil de seguir de una obra a otra. Dejando suaves pinceladas de las vivencias y la enfermedad de Van Gogh en los momentos claves para profundizar lo justo y necesario en su vida personal. La visión de la dimensión religiosa y la pasión por el absoluto del pintor conecta a la perfección con las dudas sobre la existencia de un Dios y la atracción hacia la búsqueda del arte y la comprensión de uno mismo de la coleccionista. En ese momento, el documental de Piscaglia pasa a ser un intento casi desesperado por unir de la única forma posible a estas dos personas que en vida les fue imposible encontrarse.
A pesar de la delicadeza con que el director trata el documental, y el tema del mismo, en algunas ocasiones puede llegar a dar la sensación de la inconclusión de ciertas ideas. La rapidez de una etapa a otra sin dejar que esta se asiente correctamente, como si faltase tiempo y necesitase cierta prisa para llegar al final. Aun así, el cariño que desprende la obra en su conjunto y la grandiosidad y pureza de las almas de Van Gogh y Kröller-Müller convierten en una auténtica delicia ver el arte y la pasión por la vida de los mismos en la gran pantalla.
Lo mejor: Poder disfrutar de las obras del artista en la gran pantalla.
Lo peor: La falta de algunas obras importantes o etapas del autor.
Nota: 8/10