Mientras que unos aprovechan la cuarentena para poner a prueba sus habilidades culinarias, para ejercitar su cuerpo o para leer esa pila de libro que tenía en su estantería desde hace años, otros también están dedicando mucho tiempo a consumir contenido audiovisual. Ya sean series o películas, siempre encontramos algo que se ajuste a nuestras necesidades, o estado de ánimo, en cada momento, para así hacer más llevadero el confinamiento.
Todos aquellos que tengan una lista de “películas pendientes para ver” lo tienen todo bajo control: es tan sencillo como acudir a dicho listado, escoger una y adelante. Sin embargo, otras personas, como yo, pueden pasarse horas y horas buscando la película adecuada.
Por eso, a continuación, os recomiendo algunas películas que puedan ajustarse a lo que buscáis en determinados momentos o a vuestro estado de ánimo:
- Assassination Nation (Sam Levinson, 2018)
Todos pasamos horas delante del móvil y le dedicamos muchísimo tiempo a las redes sociales. Porque parece que, si alguien no tiene Twitter o Instagram, no existe. ¿Qué pasaría si alguien filtrara todo lo que hacemos en la red? Assassination Nation se presenta como una reinterpretación de los Juicios de Salem en la era de internet, pero estas brujas modernas son unas adolescentes expuestas ante la violencia de una sociedad hipócrita y machista.
La película de Levinson puede pecar de poco sutil, pero es que tampoco pretende serlo. Así lo deja claro en los créditos iniciales cuando nos advierte lo que veremos a continuación. Con todo un despliegue de color y falsa intrascendencia, Assassination Nation es una sátira del estilo de vida americano y una mordaz crítica de la masculinidad tóxica (y dominante) y la doble moral.
- Thelma (Joachim Trier, 2017)
La vida es un proceso constante de aprendizaje, descubrimiento, reafirmación y aceptación del yo. Que se lo digan a Thelma, la protagonista de la película. Es una joven que se marcha a Oslo para continuar con sus estudios, bajo la sombra de sus sobreprotectores padres. Sin embargo, para ella las cosas empezarán a cambiar cuando conozca a una compañera de clase.
Se ha comparado muchas veces Thelma con Carrie de Brian de Palma. Tras esto te esperarás una película de terror, sin embargo, la película de Trier se muestra como un drama con tintes sobrenaturales que aborda el despertar sexual de la joven. Además de esto, hay que hacer mención especial a la preciosa y gélida fotografía, cargada de tal simbolismo que cuesta apartar la mirada de la pantalla.
- The Descent (Neil Marshall, 2005)
Si estás buscando una buena película de terror, The Descent es una excelente opción. Un año después del accidente que acabó con las vidas de su esposo e hija, Sarah decide viajar con sus amigas para explorar cuevas. La excursión se tuerce cuando se derrumba uno de los túneles; lo que empezó como una aventura entretenida se convierte en una pesadilla.
La película de Neil Marshall se ha ganado el título de cinta de culto y no es para menos. La tensión va en aumento conforme pasan los minutos, la lucha por la supervivencia prima por encima de todas las cosas y la atmósfera opresiva logra transmitir al espectador la claustrofobia, el agobio y el terror de las protagonistas. Pero si no fuera poco estar atrapadas en una remota cueva, a eso hay que sumarle la presencia de criaturas que están siempre al acecho.
- Die mitte der welt (Jakob M. Erwa, 2016)
Tras volver del campamento de verano, Phil se entera de que una tormenta ha arrasado con todo a su paso y que la relación entre su hermana gemela y su madre está casi rota. Las clases van a comenzar, su amiga le cuenta que habrá un alumno nuevo. Todo su mundo cambia al conocerlo.
El drama romántico está servido. Pero, aunque os pueda parecer que la película de Erwa solo habla de adolescencia y romance, también aborda temas como la importancia de los valores familiares y la búsqueda de nuestro lugar en el mundo.
- Upgrade (Leigh Whannell, 2018)
Sin duda alguna, la película de Whannell fue una de las mejores de 2018. Una joya sci-fi/cyberpunk que, sino has visto, debes ver. Tras un brutal atraco en el que perdió a su esposa y que le dejó parapléjico, Grey Trace acepta implantarse un chip de inteligencia artificial. Esto le dota de habilidades fuera de lo normal que le permitirá vengarse de aquellos que le arruinaron la vida.
En mi humilde opinión, Upgrade es de lo mejor de ciencia ficción que he visto en los últimos años. Si a las coreografías de las escenas de acción y a la brillante planificación y ejecución de la cámara, le sumas la potente interpretación de Logan Marshall-Green y dosis de sangre, el resultado es una excelente experiencia cinematográfica.
- Booksmart (Olivia Wilde, 2019)
No os miento cuando digo que la ópera prima de Olivia Wilde se coló entre mis películas favoritas del año después de verla. Amy y Molly son excelentes estudiantes y mejores amigas, pero, al enterarse de que los que no se han esforzado tanto como ellas también van a ir a buenas universidades, deciden pasar una alocada noche en la víspera de la graduación.
Se trata de una comedia adolescente diferente a lo que estamos acostumbrados. Booksmart es toda una carta de amor a la amistad, donde se derriban los estereotipos propios del género y el factor romántico es no es lo central, sino más bien complementario. Es una película honesta a la par que divertida y optimista, donde temas como la sexualidad se abordan con naturalidad.