Rompiendo el código es un interesante repaso por los clásicos de Hollywood que se estrenaron durante los años de censura en EEUU. El próximo martes 21 de julio será la presentación online de este libro, con su coordinador Valeriano Durán Manso. Este es el segundo volumen que compone la línea de divulgación de la editorial andaluza Readuck, tras la exitosa acogida de El Viaje de la Heroína.
El primer capítulo del libro se centra en contextualizar el código Hays, sistema de censura aplicado entre los años 1934 y 1967. De esta manera, la industria cinematográfica estadounidense debía adecuarse a una serie de reglas para ser consideradas “moralmente aceptables”. Por supuesto, el código Hays prohibía todo lo relacionado con la homosexualidad, considerada un peligro para el matrimonio canónico, además de una enfermedad. En Rompiendo el código se analizan las diversas maneras en las que guionistas y directores sorteaban estas prohibiciones para hablar de sexualidad en sus obras.
Resulta curioso comparar estos mecanismos con la representación del colectivo LGBT+ en la actualidad. Los detractores de la presencia de lo queer en la cultura popular (o de las mujeres, de la diversidad racial, etc.) rechazan de manera vehemente todo contenido ínfimamente relacionado con diversidad sexual. Un ejemplo reciente es el revuelo que ha causado Ellie, personaje de The Last of Us, previo al estreno de la segunda parte de este exitoso videojuego. No existe un sistema de censura formal, pero el rechazo de determinados sectores de la sociedad dificulta el tratamiento audiovisual de esta temática.
El queerbaiting recoge el testigo del código Hays. Aunque se utiliza a los personajes LGBT como reclamo, no hay un interés real en darles una profundidad o una importancia que realmente aporte a la representación del colectivo en la cultura popular. Tras la muerte del personaje de Lexa en The 100, abiertamente homosexual, los fans manifestaron su disconformidad con la decisión en redes sociales. En ocasiones, se dejan intuir relaciones homosexuales entre personajes que nunca llegan a mostrarse de manera explícita. Por ejemplo, en la serie británica Sherlock o la americana Supernatural.
Esto de sugerir sin llegar a enseñar aparece en títulos clásicos como Rebecca (Alfred Hitchcock, 1940), Red River (Howard Hawks, 1948), o Ben-Hur (William Wyler, 1959), de entre todas las que se analizan en Rompiendo el código. Películas pertenecientes a diversos géneros, con sexualidades latentes que se manifiestan de distintas maneras, que se estrenaron en una época de restricciones.
El martes 21 de julio, a las siete de la tarde, tenéis una cita en el canal de YouTube de la editorial Readuck.
