‘Top Gun: Maverick’, cuando Tom Cruise quiso ser James Bond

Título original: Top Gun: Maverick

Año: 2022

Duración: 131 min.

País: Estados Unidos

Dirección: Joseph Kosinski

Guión: Ehren Kruger, Eric Singer, Christopher McQuarrie.  Personaje: Jim Cash, Jack Epps Jr.. Historia: Peter Craig, Justin Marks

Fotografía: Claudio Miranda

Reparto: Tom Cruise, Miles Teller, Jennifer Connelly, Jon Hamm, Glen Powell, Ed Harris, Val Kilmer, Lewis Pullman, Charles Parnell, Bashir Salahuddin, Monica Barbaro, Jay Ellis, Danny Ramirez.

Productora: Paramount Pictures, Jerry Bruckheimer Films, Skydance Productions.

Distribuidora: Paramount Pictures.

Género: Acción.

Ficha en Filmaffinity

La tan ansiada, no de forma unánime, secuela de Top Gun (Stone, 1986) está aquí. Han sido años de especulaciones, de retrasos a raíz de la dichosa pandemia y la eterna promesa de Tom Cruise, reafirmada en su estreno en Cannes, de que ninguna película que lleve el sello de una de las sonrisas más icónicas de la historia del cine moderno llegará a una plataforma sin pasar por salas. Eso, todo sea dicho, se lo hemos de agradecer a Tom.

No me meteré en si era necesaria o no una secuela de aquella cinta rebosante de testosterona y extraña tensión sexual entre todos sus protagonistas, sino en descifrar los códigos en los que se mueve Top Gun: Maverick. Digamos que estamos ante dos películas encapsuladas en una: la que se desarrolla en el aire y la que acontece en la tierra.

Bien, la película que tiene lugar por los aires es espectacular, tiene un ritmo trepidante y hace que no quieras pestañear ni un solo segundo. Hacía años que no se hacía un producto de acción tan tan bueno por parte de un gran estudio y ahí hay que dar gracias mayormente a la obsesión de Tom Cruise por rodar cuanto más real mejor y no echar mano del CGI. Se nota y mucho.

Dicho esto, hay que decir que la historia que se cuenta a ras de suelo es muy convencional, próxima a lo rancio. Cargada de referencias nostálgicas a su predecesora, la película mete con calzador tramas ‘novedosas’ que parecen más anticuadas que la cinta original, de los años 80 hemos de recordar. En lo nostálgico a veces es complicado entrar, pero en lo nuevo es rematadamente difícil hacerlo sin reírse pese a que no sea ese su cometido en muchas ocasiones.

Fotograma de Top Gun: Maverick.

La trama de la secuela de la icónica obra de Tony Scott es sencilla: Maverick vuelve a la marina para entrenar a un grupo de pilotos de cara a una misión que parece imposible de llevar a cabo.

A lo largo de la película, es imposible obvia la sensación de que a Tom Cruise le chiflaría vestirse por un día de James Bond y salvar el mundo. Y es lo que busca su Maverick en esta cinta echando mano de las clásicas armas del superagente británico. Simpatía única, imán de mujeres, la frase perfecta en cada momento y una inquebrantable fortuna allá donde dirige el morro de su avión (no el Aston Martin como Bond, aunque hay una escena que es incluso similar a dicho fenómeno).

Es curioso que esta película no se moje a la hora de nombrar a su enemigo. El ejercito estadounidense se enfrenta aquí a un poderoso y peligrosísimo rival que otrora luciría martillos y hoces hasta en el último botón del avión, pero que en este caso no tiene bandera, no se le escucha hablar y no se le ve mismamente el color de piel. Muy curioso el cambio de paradigma en el blockbuster.

Y eso es precisamente Top Gun: Maverick, un blockbuster con todas las de la ley. Un trepidante ejercicio de épica (mucho más que en la original), acción exuberante, imágenes espectaculares sin miramientos en el presupuesto y una estrella… ¡Qué estrella Tom Cruise! Borda un personaje hecho por y para él, se gusta y mucho, lo que es realmente un deleite para todo amante del cine de acción.

Estamos sin duda ante una de las citas más especiales del año en el mundo del cine. Top Gun: Maverick llega a la gran pantalla de la mano de Paramount Pictures y estará disponible en salas a partir del 28 de mayo. Y lo que es más importante, Tom Cruise está de vuelta.

Lo mejor: La espectacularidad de las imágenes cuando la película va por los aires.

Lo peor: Lo mundana que se vuelve cuando pisa el suelo.

Nota: 7/10