‘Fast & furious: Hobbs & Shaw’, la redención palomitera

Título original: Fast & Furious: Hobbs & Shaw

Año: 2019

Duración: 135 min.

País: Estados Unidos

Dirección: David Leitch

Guion: Chris Morgan, Drew Pearce (Personaje: Gary Scott Thompson. Historia: Chris Morgan)

Música: Tyler Bates

Fotografía: Jonathan Sela

Reparto: Dwayne Johnson, Jason Statham, Idris Elba, Vanessa Kirby, Helen Mirren, Eiza González, Eddie Marsan, Ryan Reynolds, Kevin Hart.

Productora: Universal Pictures

Género: Acción. Comedia. Intriga. Ciencia ficción | Buddy Film. Familia. Coches / Automovilismo. Spin-off

Ficha en Sensacine

Dos hombres de acción sin nada en común salvo una batalla perdida contra la alopecia se ven obligados a formar una insólita alianza cuando llega a sus oídos que una malvada organización busca purgar la raza humana (nada más y nada menos) propagando un virus mortal.

Este spin-off de la saga Fast & Furious supone la novena película de la franquicia (aunque no vaya a ser contada como tal). Con un guion sorprendentemente ágil y agudo en las escenas de diálogo, unos protagonistas que derrochan una química innegable, unos personajes secundarios notablemente carismáticos y unas escenas de acción tan bien rodadas como (evidentemente) inverosímiles, Hobbs & Shaw será para el espectador una grata sorpresa que cumplirá su noble cometido de entretener durante sus 136 minutos de duración.

El contraste entre el refinado, sofisticado y muy británico personaje de Jason Statham y el Hulk maorí lector de Nietzsche que encarna Dwayne Johnson (Jumanji: Bienvenidos a la jungla) aporta a la trama un balance y un giro cómico más que necesario en una serie de películas como estas. La Roca, por cierto, se está convirtiendo en un actor casi bueno.

El hecho de que esta cinta no se tome en ningún momento muy en serio a sí misma y mantenga un muy acertado tono auto paródico hace que el espectador pueda ser indulgente con los agujeros del guion y las chaladas acrobacias circenses con motos y camiones. Esta es una película para dejarse llevar y aceptar sin cuestionamiento la rocambolesca historia que se desarrolla delante de uno.

hobbs & shaw
Jason Statham y Dwayne Johnson en una escena de la película

Otro gran acierto son los refrescantes y divertidos personajes secundarios (especial mención para la maravillosa Helen Mirren) que ayudan a distender el tono incluso en las escenas de tensión. Aunque Cliff Curtis no termina de intimidar demasiado bailando la “Haka” en la batalla final. Ryan Reynolds y Kevin Hart son los recursos cómicos que acapararán todas las atenciones durante su tiempo en pantalla.

Sin embargo, hay algunas cosas que fallan indudablemente en esta película. La más notaria, el malo. El británico Idris Elba que ha demostrado durante estos últimos años ser un intérprete talentoso, hace lo que puede por dotar de algún atisbo de alma a este personaje tan pobremente escrito que no genera más que dolorosa apatía.

Además, aunque sería ingenuo (y ridículo) pretender que una película de esta saga no estuviera repleta de escenas de acción, persecuciones automovilísticas y sonoras explosiones, lo cierto es que la larga duración de algunas de estas secuencias puede sobresaturar y exasperar a menudo a lo largo de la cinta. Y más cuando las escenas de diálogo son el mayor valor artístico de esta simpática y despreocupada película.

Hobbs & Shaw es una superproducción palomitera de verano con mucha acción (demasiada) y un mosaico extraordinario de talentos tanto delante como detrás de las cámaras que pondrán todos sus esfuerzos por hacer al espectador pasar un rato agradable y divertido. Algo que en estos tiempos (aunque no sea mucho) no es poco.

Lo mejor: Su talentoso y encantador elenco.

Lo peor: La exasperantemente larga persecución con el camión blindado.        

Nota: 7/10