La segunda temporada de ‘Riverdale’ promete ser mucho más oscura que la primera, conectando aún más con el cine de terror de los 90
Este verano, la aclamada serie adolescente ‘Riverdale’ hacía gala de su fama arrasando en los Teen Choice Awards con los premios a Mejor Drama Televisivo, Serie Revelación, Mejor Actor Dramático ( Cole Sprouse) y Mejor Relación Amorosa (Lili Reinhart y Cole Sprouse). Dos meses después, sus seguidores esperan ansiosos la continuación de los líos románticos, los misterios y los secretos, que vuelven rodeados de mayor tenebrismo.
El jueves 12 de octubre a las 21:40 en Movistar Series (dial 12) podremos ver el primer capítulo de una segunda temporada mucho más oscura y cercana a películas de terror noventeras como ‘Scream’, ‘Sé lo que hicisteis’ o ‘The Faculty’.
(Atención spoilers T1)
Los nuevos acontecimientos que se desarrollarán estarán fuertemente marcados por un cambio en la personalidad de Archie que, tras el disparo de su padre, perderá la inocencia que le caracterizaba y comenzará a desconfiar aun más de todos los que le rodean, incluidos sus amigos. Esto afectará a su relación con Jughead, por las sospechas hacia las Serpientes, y con Veronica, quien a su vez se ve afectada por nuevos problemas familiares y personales: la reaparición de su despiadado padre, Hiram Lodge, y la llegada de su exnovio de Nueva York, Nick St. Clair (Graham Phillips, ‘The Good Wife’). Jughead experimentará un mayor acercamiento a su familia a medida que descubre su propia identidad. Betty, por su parte, deberá enfrentarse a su lado más oscuro y torturado.
Además, en esta temporada el personaje de Toni Topaz (Vanessa Morgan), versión femenina y abiertamente bisexual del personaje de Jughead, llega a Riverdale prometiendo dar problemas. Por su parte, Hiram Lodge (Mark Consuelos), el padre de Veronica, complicará a todos con sus negocios turbios en la localidad.
A pesar de haberse resuelto con éxito al final de la primera temporada, el impactante asesinato de Jason Blossom marcó un antes y un después en la localidad de Riverdale, abriendo una herida profunda que va a ser difícil de cerrar. Los habitantes de Riverdale ya nunca volverán a ser los mismos, como si algo o alguien hubiese contaminado su esencia y se hubiese instalado allí para quedarse. O quizá es la madurez, que está llamando a golpes a la puerta…