Tres días de intenso rodaje, mínimo presupuesto y talento deslumbrante. Esos fueron los ingredientes que permitieron al cortometraje ‘Elena’ llevarse el muy merecido premio FCOM al Mejor Cortometraje en la XIX edición de la gala #ComCorto de Sevilla. Tras el júbilo de la ceremonia, las fotos y los ensordecedores aplausos, sacamos de toda aquella algarabía al director y creador del corto, Daniel Franco, y a Isabel Victoria, espléndida protagonista de la historia. Buscamos un sitio para poder charlar, lejos del griterío, del photocall y de la cerveza. Aún así, no es fácil escapar. Organizadores, asistentes y otros concursantes vienen una y otra vez para felicitarles por su premio. A fin y al cabo, la noche es suya.
Daniel comienza confesando que la historia “surgió hace tiempo realmente, como una idea de tantas, y la dejé escrita en un papel”. Una afortunada casualidad quiso que la idea de ‘Elena’ saliese del cajón y volviese a su mente, justo un día antes de presentar la idea para una asignatura. Bendita casualidad. Al preguntar si aquella idea inicial había cambiado mucho con respecto al resultado final, Daniel es claro: “Tuvimos todo el equipo muchísimas reuniones de guión, le dimos doscientas vueltas, y cambiamos la historia”
Por suerte, la esencia de la misma permaneció inmutable. Elena seguiría siendo aquella niña dulce cuya vida daría un trágico giro al ser secuestrada, maltratada y violada. Dos Elenas. Una de sonrosadas mejillas y otra de sonrosados chichones. Una de inocentes sonrisas y otra de crueles lágrimas. Dos historias contadas de forma simultánea, con pantalla dividida, todo un acierto para la narración. Dos historias que el espectador llega a desear que nunca se toquen, que permanezcan lo más separadas posible, hasta que todo encaja.
Un mismo personaje, una misma actriz, dos mundos distintos. Isabel Victoria cuenta como se lleva a cabo esa dualidad interpretativa. Sorprende oírle decir que le costó menos la parte dura de la historia. “Porque el personaje de Elena es muy distinto a mí. Es muy dulce, y yo, aunque lo parezca, no lo soy tanto”, explica entre risas. En cambio, la parte “buena” de la historia le costó más. “Había veces que decía: ¡joder que rabia me da Elena!”. Tan sólo media hora antes, Isabel se llevaba entre estruendosos vítores la Mención a Mejor Interpretación Femenina. Con algún que otro papel secundario en su historial y unos estudios en Arte Dramático, ‘Elena’ ha sido la primera vez que Isabel hacía de protagonista. Y su estreno ha dejado a todos asombrados.
Hablando de las localizaciones, Daniel cuenta cómo encontraron el zulo donde Elena sufre. “Cuando llegamos a la localización y empezamos a explorar el sitio descubrimos otra diez veces mejor que donde nos habían dejado para grabar”. Un escenario perfecto.
Además de Mejor Cortometraje y Mejor Actriz, se han llevado el de Mejor Banda Sonora Original y el Premio RTVA a la Mejor Creación Andaluza ¿Esperaban tal éxito en la gala? Daniel es tajante: “Yo el de mejor actriz sí me lo esperaba”.
Toca hablar del futuro. “A raíz de este premio, tenemos ya varias ideas que intentaremos llevarlas a cabo”. Mil euros por el Mejor Corto, en manos de este equipo, suena prometedor. Daniel lo tiene claro: “Prefiero hacer el corto con mis ideas propias, la obra en cuestión, y que la obra hable por sí sola”. ‘Elena’ ha hablado por sí sola, y ha dejado a muchos sin habla. #ComCorto puede ser el primero de muchos pasos que este grupo va a realizar. Y habrá que seguir con lupa cada paso que den.
Es hora ya de que vuelvan a la fiesta. Sería egoísta retenerles más. Con sus galardones en mano, regresan al bullicio. Les esperan aún muchas felicitaciones. A fin y al cabo, la noche es suya.
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