‘Mamífera’, la cuestión de ser madre

Liliana Torres nos vuelve a sorprender con su revolucionaria comedia dramática, Mamífera. Una historia brutalmente sincera y real que no deja indiferente a nadie. Torres nos da la posibilidad de ver qué hay más allá de la mujer que quiere ser madre, ya que, sorpresa, no todas quieren serlo.

Mamífera, nos cuenta la historia de Lola (María Rodríguez Soto), una mujer de convicciones fuertes que nunca había contemplado la maternidad, hasta que un embarazo accidental la confronta con un conflicto interno desgarrador. Seguiremos a Lola durante los tres días siguientes a la noticia, en la que su pareja, Bruno (Enric Auquer), sus amigas y sus familiares, la harán cuestionarse todo respecto a la maternidad.

La dirección de Torres nos sumerge en un mundo de ficción con un guion excepcional que transita entre momentos de felicidad, dolor y autenticidad. Uno de los momentos más impactantes, es cuando vemos a dos amigas que se acompañan mutuamente durante el duelo, estiradas en el suelo en posición fetal, evocando vívidamente la imagen de un embrión dentro del vientre materno. Otra magnífica idea de la directora es el uso del collage en la película, una elección sorprendente pero muy ingeniosa, que nos deja ver todos los pensamientos de la protagonista, sus pesadillas y sus miedos más profundos.

Rodríguez, quien ganó el pasado mes de marzo el Premio a Mejor interpretación en el South by Southwest Festival de Austin, nos muestra una mujer valiente y extremadamente honesta, al personificar a una mujer que desafía los estereotipos. Claramente, hace uno de sus mejores papeles. Su naturalidad y talento hacen que Lola cobre vida con una naturalidad y talento indiscutible.

La película nos brinda un espacio seguro en el que cuestionarnos la posibilidad de ser mujer y tener una vida sin hijos, pero ¿es eso posible?

Las expectativas de nuestra sociedad hacia las mujeres son tales que muchos no ven la posibilidad de estas mamíferas a rechazar la maternidad. En el imaginario colectivo, esta opción cada vez está más interiorizada, pero pocas veces se ha visto representada en la gran pantalla. Y gracias a la directora, ahora, es una realidad. Torres desafía la noción de que ser mujer implica necesariamente ser madre, invitando a la audiencia a reflexionar sobre la posibilidad de una vida sin hijos.

Tal y como vemos en el metraje, elegir esta opción no será tarea fácil, ya que esta, siempre viene acompañada de un escrutinio social constante, por unas normas culturales que tradicionalmente han asociado la identidad femenina con la maternidad. Al mismo tiempo, que se asume que una no quiere ser madre por problemas psicológicos o mentales, condenándola así, de una forma injusta, por la simple razón de no querer tener hijos. Entonces, ¿existe la posibilidad de ser mujer, sin ser madre?

Mamífera nos invita a reflexionar sobre la maternidad no deseada, con el objetivo de desestigmatizar la decisión de no ser madre, para que muchas mujeres se sientan escuchadas y comprendidas. Con esta obra, Torres abre un espacio para la inclusión y la representación de voces que durante mucho tiempo han sido marginadas en la narrativa cultural.