Título original: Anatomía de un instante
Año: 2025
Duración: 45 min.
País: España, Francia
Dirección: Alberto Rodríguez, Paco R. Baños
Guión: Rafael Cobos, Fran Araujo, Alberto Rodríguez
Reparto: Álvaro Morte, Manolo Solo, Eduard Fernández
Música: Julio de la Rosa
Fotografía: Alex Catalán
Montaje: José M.G. Moyano
Productoras: Arte France, DLO Producciones, Movistar Plus+
Distribuidora: Movistar Plus+
Género: Drama
Reseña recogida, editada y extendida de la crónica de la Sección Oficial de la 73º edición del Festival de San Sebastián
Alberto Rodríguez, el cineasta sevillano más importante en la actualidad vuelve este año con dos de las producciones españoles más anticipadas del año: su nueva película Los Tigres y su nueva miniserie para Movistar+, Anatomía de un instante, la cual narra los hechos históricos que llegaron a desencadenar el fallido golpe de estado del 23F.
Lo que más se puede destacar de la serie son las fantásticas actuaciones encabezada por un gran reparto pero en el que afortunadamente destacan dos de los protagonistas: Álvaro Morte como Adolfo Suárez es irreconocible, sabe darle el punto de humanidad al personaje y distanciamiento político y por supuesto el gran Manolo Solo es el mismo caso, sin duda la actuación más emocional que da vida a Manuel Gutiérrez Mellado, el militar que fue al contrario de los valores franquistas de los militares y se enfrento a ellos en la histórica imagen.
Más que una serie del 23F, es una serie sobre el proceso de la democracia en España y los conflictos políticos internos que se crearon, la decisión de ser políticamente neutra al no idealizar a sus héroes sino mostrándolo como seres humanos frágiles pero sin quitarles el mérito histórico es una apuesta valiente y que afortunadamente funciona, es muy buena para aprender historia de nuestro país y mantiene el interés.
Fotograma de ‘Anatomía de un instante’ (Foto: Movistar Plus+)
Eso es precisamente algo que consigue destacar a la serie y es la humanización de todas estas figuras políticas, cada capítulo está enfocado en un personaje o partido diferente, aún continuando la historia principal, el protagonista puede ser Adolfo, Carrillo, Gutiérrez Mellado o hasta los propios militares, quienes son los más peligrosos de la serie precisamente por su negación al cambio y el avance de una nueva España.
Aunque hay que aclarar que se nota que es televisión por lo que la calidad cinematográfica no es comparable a los trabajos que el cineasta ya está acostumbrado a entregar, no es mala ni mucho menos y no es culpa del talentoso equipo sino del tipo de producción que es, claro que para televisión es impecable no hay que quitarle mérito pero uno siente que hasta el sevillano queda restringido sobre todo tras haber obras maestras de la talla de Twin Peaks: The Return o Breaking Bad que muestran un lenguaje cinematográfico bello que a Rodríguez probablemente hubiera sido más que capaz de emplear dado su maestría.
Además la narración en muchos momentos se excede demasiado, claro que es importante dar el contexto histórico al espectador y al menos en el final lo justifican, pero a cierto punto llega a ser abrumador y aunque sí que es cierto que el final no llega a ser malo, al final a uno le da la sensación de que a la hora de retratar el 23-F como tal se queda corta, es más un recorrido por los primeros años de la democracia Española que hizo pasar ese momento de terror, pero no es el clímax angustiante que podía ser, aunque he de mencionar que el plano final es perfecto a la vez que melancólico.
A pesar de no ser una serie perfecta, sin duda es un testimonio muy interesante, original y hasta educativo con unas interpretaciones poderosas que te mantienen el interés, y también al menos está justificado que sea una serie por su estructura, a diferencia de otras miniseries que podrían haber sido montada como películas de 150 o 180 minutos o haber sido acortadas y no habría problema (La La La Canción). El ranking de los episodios en orden descendente sería este: 1,3,4,2


