Título original: Silver Haze
Año: 2023
País: Países Bajos
Dirección: Sacha Polak
Guion: Sacha Polak
Fotografía: Tibor Dingelstad
Reparto: Vicky Knight, Esme Creed-Miles
Productoras: Emu Films, Viking Film
Género: Drama
Ficha completa en FilmAffinity
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Imagina una noche fría y húmeda, el tipo de noche en la que la niebla se adueña de todo y borra los límites entre la realidad y el sueño. Y de repente, un flash de luz naranja, un tono anaranjado que tiñe el gris de la niebla, un calor abrasador.
Un incendio eterno, real y en tu cabeza.
Franky, una joven enfermera con cicatrices que hablan de un pasado doloroso, se encuentra en ese limbo. Quince años atrás, un incendio devastó su vida, dejándole marcas físicas y emocionales que aún no ha logrado cicatrizar. Ahora, obsesionada por encontrar respuestas, busca venganza, aferrándose a un pasado que no la deja avanzar.
Así comienza Silver Haze: con un laberinto de dolor, culpa y anhelos; un mundo descolorido, donde la esperanza parece haberse extinguido. El mundo de Franky, a la cual Vicky Knight da vida en una interpretación visceral y conmovedora, transmitiendo de manera inteligente los extremos tan fuertes que tiene este personaje complejo.
Con una fotografía tomando el rol de un personaje más (con sus colores fríos y sombras alargadas), la cámara en la obra nos adentra en el interior de la protagonista, revelando sus más absolutos miedos y deseos.
La familia: lazos que unen y heridas que separan
La familia es sin duda otro de los temas centrales de la película. La relación entre Franky y su hermana menor, tan compleja como auténtica, nos empuja a explorar cómo los traumas familiares pueden marcar a una generación entera y cómo es difícil para todos los miembros superar las heridas del pasado.
Pero la familia se extiende más allá de los lazos sanguíneos. Los colegas de Franky en el hospital, o su compañera de casa Alicia, forman una especie de familia elegida, un grupo de personas que se apoyan mutuamente. Un reflejo de la necesidad humana de pertenencia y conexión.
Un microcosmos hospitalario
El hospital en el que trabaja Franky como enfermera funciona como un microcosmos de la sociedad, un lugar donde se cruzan las diferentes realidades y se ponen a prueba los valores humanos. Es el refugio de Franky, donde encuentra un sentido a su vida. Donde puede ayudar a otros y, al mismo tiempo, evadirse de sus propios problemas.
Sin embargo, el hospital también es un lugar de sufrimiento y muerte, un constante recordatorio de la fragilidad de la vida. Este contraste entre la esperanza y la desesperanza, la vida y la muerte, se refleja en la relación de Franky con sus pacientes, especialmente en la relación que va a surgir con Florence.
Y es que se nota que la película busca reflexionar sobre la sociedad en la que vivimos, plantear interrogantes sobre la salud mental, la falta de recursos en el sistema y el estigma que rodea a las enfermedades mentales, así como la importancia de cuidar correctamente de los demás.
Conclusión
Más allá de la venganza, Silver Haze es un viaje hacia la sanación. A través de su relación con Florence, Alice y todos los demás personajes con los que se encuentra, Franky comienza a vislumbrar la posibilidad de un futuro diferente.
La directora Sacha Polak nos presenta un retrato crudo y realista de la salud mental, sin juzgar, mostrando las consecuencias de un trauma no resuelto. La película no ofrece respuestas fáciles, sino que nos invita a reflexionar sobre la importancia del perdón, el amor y la aceptación.
Si buscas una película que te conmueva hasta lo más profundo, Silver Haze es tu mejor opción: te hará cuestionar tus propias creencias y te recordará la fuerza del espíritu humano.