Una película, salida de la compleja mente de Quentin Tarantino, se está cociendo en las oficinas de Sony. Hace un mes aproximadamente, Deadline informó sobre el acuerdo entre la productora y el realizador de Knoxville, que se encontraba en la búsqueda de compañía para su noveno film tras el escándalo de Harvey Weinstein, ligado intrínsicamente a ‘The Weinstein Company’, su financiadora habitual.
El nuevo largometraje, apodado «#9», se rumoreó durante meses que abarcaría la historia de la familia Manson y los asesinatos perpetrados por la misma, especialmente los de Sharon Tate (por aquel entonces esposa del director Roman Polanski) y sus acompañantes en su residencia de Los Ángeles, en 1969. Todo esto fue desmentido por el mismísimo Quentin Tarantino, que si bien sí afirmó que en la historia se hablaría de los sangrientos actos de aquella noche de verano, la película no trataría sobre tal, sino sobre el año 1969 en sí mismo.
Estas declaraciones arrojan más preguntas que respuestas: si «#9» no trata sobre Charles Manson y sus crueles acólitos… ¿Cuál es el argumento de la película? ¿Con qué reparto contará? ¿Qué más aspectos de 1969 además de estos crímenes se tratarán en la película? ¿Se inscribirá la vanagloriada banda sonora personal de las películas de Tarantino a este año solamente o alternará? ¿Quizás repetirá en la contratación de un compositor como hizo en The Hateful Eight?
Para las dos primeras preguntas tenemos dos respuestas, que si bien no oficiales, proceden de una fuente fiable como lo es la revista Vanity Fair, además de contar con un sentido y lógica aplastantes.
El argumento giraría en torno a un actor que ha conseguido un enorme éxito en TV y que, junto a su compañero y también doble de acción, buscarán la manera de introducirse en el mundo del cine. No es nada descabellada la aceptación de esta historia, pues como comprobamos en Death Proof, ya Tarantino relataba una historia de metacine sobre un stuntman que se dedicaba a asesinar a chicas jóvenes con su coche de acción. Parece ser que retomará la idea de explicarnos cómo era el espectáculo cinematográfico en la época de los efectos especiales prácticos, lejos del CGI de hoy día. ¿Será este doble de acción el personaje que Kurt Russell interpretó en Death Proof?
Por otra parte, ha habido una considerable lista de actrices y actores relacionados con esta cinta, que recordemos aún se encuentra en fase de preproducción y que espera su comienzo de rodaje para el primer semestre de 2018. Margot Robbie (presumiblemente para interpretar a la bellísima Sharon Tate), Jennifer Lawrence (por problemas de agenda no interpretó a Daisy Domergue en Los Odiosos Ocho), Leonardo DiCaprio (imaginemos por un momento que se mete en la piel de Charles Manson…), Brad Pritt (repetirá tras Malditos Bastardos), Samuel L. Jackson (¿alguien lo dudaba?) y probablemente la figura más sorprendente: Tom Cruise, en la que sería su primera colaboración con Quentin Tarantino. Se desconoce si resulta ser el elenco final, si son solo suposiciones o a quién interpretará cada uno, pero de confirmarse, sería un reparto de enorme peso y calidad para la cinta.
Finalmente, conocemos su fecha de estreno provisional: el 9 de agosto de 2019. ¿No te suena? Es el 50º aniversario de los asesinatos de Sharon Tate y amigos por la familia Manson. Desde luego, es una elección un tanto macabra que suscitará no pocas polémicas. Pero… ¿acaso al genio de Knoxville le ha importado alguna vez llamar la atención?
Desde 35 Milímetros seguiremos informando de los avances de la nueva cinta «#9» de Tarantino, y otras muchas noticias del mundo del celuloide. ¿Me permites una recomendación para ir abriendo apetito? La canción de The Beatles a través de la cual Manson creía que le enviaban un mensaje sobre una inminente guerra racial: Helter Skelter.