F. Javier Gutiérrez

F. Javier Gutiérrez (‘La espera’): «Hay un exceso de contenido hecho a través de fórmulas.»

Hay veces en que el cine de género es tan independiente que infinidad de películas pasan desapercibidas. Pues ahí tienen la principal misión de los festivales: descubrirlas y darlas a conocer. Y ese podría ser el caso de La espera, el largometraje de F. Javier Gutiérrez que compite en la sección oficial del Festival de Sitges.

A caballo entre el western, el thriller y el fantástico, La Espera es una película tan personal como conmovedora. Filmada con delicadeza y con una interpretación magistral de Víctor Clavijo, la película narra la historia del guarda de una finca andaluza que, tras aceptar el soborno de un cazador, sufre una serie de calamidades de carácter sobrenatural.

Nos reunimos con F. Javier Gutiérrez para hablar de la dualidad entre el arraigo de pertenecer a una tierra y a una familia. Pero también para charlar sobre la situación del cine independiente actual.

PREGUNTA: Eres público fiel de Sitges y ahora pasas al otro lado de la pantalla.

F. JAVIER GUTIÉRREZ: Los festivales impulsan a crear tendencias y ayudan a proyectos pequeños con menos visibilidad. Festivales como Sitges se convierten en el grito de muchos directores por el apoyo a películas independientes. Descubrir, de toda la multitud de películas, algo diferente es recuperar la emoción por ver el cine en pantalla grande.

P: ¿Hay menos cine de autor?

F.J.G.: Hay un exceso de contenido hecho a través de fórmulas que personalmente hace que eche de menos ver otro tipo de cine. Hablo de algo más atrevido que camine en otras direcciones. Y eso es lo que quería hacer desde mi pequeña aportación como director. Como espectador también quiero ver algo que tenga otro lenguaje.

P: Es difícil hablar de La Espera sin hacer mención a la mutación de géneros que sufre la película ¿A qué se debe esa decisión?

F.J.G.: El cine siempre explora historias humanas, independientemente del género. Si es cierto que el fantástico te da más libertad. En La espera, no revelar el fantástico desde el inicio hace que la experiencia cinematográfica sea aún más interesante. Ir descubriendo por el camino lo que te vas a encontrar dejando que la película te lleve.

P: Y la película comienza siendo un western

F.J.G.: He visto tantos westerns de pequeño que los aburrí (ríe), y supongo que no lo hago de una forma racional. Poco a poco, y con los años, descubrí de la grandeza de esas películas, y mientras planificaba La espera noté que necesitaba esa estética.

P: En La espera se recurre muchas veces a los rostros de los personajes mientras se oculta lo que sucede a su alrededor. 

F.J.G.: A mí me encanta el cine contenido. Y desde luego que hay un punto de obsesión y acercamiento al personaje protagonista. Víctor Clavijo perdió siete kilos para enfatizar la degradación y su asfixia como personaje. La película es una exploración del alma humana entre otras muchas cosas.

La espera se estrenará en cines el 1 de noviembre.