Álvaro Cervantes
Álvaro Cervantes

Álvaro Cervantes: «Cada vez la gente se mira menos a la cara»

Entrevistamos a Álvaro Cervantes, protagonista de El Árbol de la sangre junto a Úrsula Corberó.

Álvaro Cervantes

El actor catalán Álvaro Cervantes es un gran ejemplo del indiscutible talento interpretativo de nuestro país. Con tan solo 29 años, ha protagonizado series como Carlos, Rey Emperador, Luna: El Misterio de Calenda y La Zona de Movistar+. En la gran pantalla fue popular por su papel de Pollo en Tres metros sobre el cielo, pero hemos podido disfrutar de su trabajo especialmente en 1898: Los últimos de Filipinas y ahora en su última película El Árbol de la sangre de Julio Medem. También ha compartido escena con Peter Dinklage (Juego de Tronos) en uno de los cortometrajes de Estrella Damm. La trayectoria de Álvaro Cervantes brilla tanto como su mirada expresiva, gracias a su esfuerzo, humildad y trabajo constante.

En 35 Milímetros hemos podido entrevistarle para conocer cómo ha sido su experiencia en El Árbol de la sangre y reflexionar sobre su trayectoria profesional en la actualidad.

PREGUNTA: ¡Hola Álvaro! Vuelves a la gran pantalla, esta vez con el director Julio Medem.

RESPUESTA: Sí, la verdad es que ha sido un regalo formar parte del universo de Julio Medem. Hacía mucho tiempo que tenía ganas de trabajar con él, casi como un deseo imposible. Al poder formar parte de esta historia con tanta dimensión, he sentido que toca las grandes pasiones del ser humano. Es muy especial.

P: ¿Cómo te sentiste al conocer qué serías el protagonista de ‘El árbol de la sangre’?

R: Sentí una alegría enorme. El casting fue toda una experiencia, un viaje, lo disfruté muchísimo. Me sentí muy cuidado. Leyendo el guion me sorprendí con la cantidad de lenguaje cinematográfico que contiene y la cantidad de imágenes tan espectaculares que genera. Tantos estímulos, tantas imágenes por segundo… Que algo se te quede es muy complicado, pero Julio lo consigue. Minuto tras minuto, no te deja de sorprender.

P: ¿Qué tal la experiencia del rodaje?

R: Disfruté mucho del rodaje y me sentí muy arropado. Me pareció mágico coincidir con Úrsula Corberó. Luego al ver la película es de las veces que más me he metido en el viaje: más allá de que yo trabaje en ella, como espectador viajo también. Es muy gustoso y el feedback que me llega de la gente, de los periodistas y de la gente de la industria es muy bueno. La película mueve cosas y creo que el cine está para eso.

P: La historia tiene una gran número de personajes. ¿Te hacía ilusión trabajar con alguien en especial?

R: Yo he tenido todo con Úrsula: ha sido muy especial porque somos amigos desde los 16 y nunca habíamos trabajado juntos. También he podido trabajar con Patricia López Arnaiz, que la conocí rodando la película, y me parece una actriz descomunal de la que ahora me considero muy fan.

Me he quedado con ganas de coincidir en escena con el espectacular reparto que tiene la película. Pero, por lo menos, he coincidido en rodaje con estos grandes de nuestro cine que me emociona mucho conocer. He conocido a Ángela Molina, que me ha enamorado por completo, y he podido conversar con Josep Maria Pou y disfrutar de su sabiduría. Emilio Gutiérrez Caba es la humildad y la paz con patas. También vuelvo a coincidir con Daniel Grao. A Najwra Nimri la adoro y Joaquín Furriel ha sido un gran descubrimiento, es un tipo espectacular. Admiro mucho a todos ellos.

P: ¿Qué es lo que te llevas de Marc, tu personaje?

R: De Marc me llevo su arrojo en lo romántico. Ahora hay más pudor y más exposición en las redes sociales. Cada vez la gente se mira menos a la cara y se dice menos las verdades frente a frente. En este sentido, Marc tiene esa pureza e incluso esa necesidad de sinceridad y verdad. Creo que es algo que parece estar obsoleto, pero es lo esencial para tener relaciones sanas y profundas.

Álvaro Cervantes

P: Continúa la frase en pocas palabras: «El Árbol de la sangre es…«

R: Un viaje a las entrañas.

P: ¿Crees que esta película de Julio Medem está dirigida a todo tipo de espectador?

R: Es una película que puede tener muchos niveles de lectura, pero va a conectar con todo el mundo que quiera dejarse llevar por el viaje. Julio Medem lo dice: él abre una ventanita y propone al espectador mirar por ella. Si el espectador está dispuesto, viaja y se sumerge en ese mundo que plantea. De las películas de Julio, puede que sea su película más comercial –en el buen sentido de la palabra–. Al final está hablando de todos: del ser humano y de España. Hace una radiografía muy acertada sin ser explícita de qué árbol es España y qué sangre recorre por él.

P: Referente a esto, se muestran con naturalidad lenguas como el catalán y el euskera. ¿Cuál es tu opinión al respecto?

R: Me encanta. Creo que hay culturas muy diversas y muy ricas en España para poder retratarlas y que eso motive a la historia para que sea narrativamente potente. Creo que está contado de una manera muy natural y es un regalo para el espectador poder ver un caserío del País Vasco, una familia catalana, un cortijo andaluz… entrelazándose para formar este gran árbol que es la película.

P: ¿Crees que todo el mundo tiene secretos ocultos como en la película?

R: Por supuesto, todos tenemos secretos. Lo único que en El Árbol de la Sangre son secretos muy gordos y muy dolorosos. Pero evidentemente, por un lado o por otro, a todo el mundo le va a tocar un punto.

P: Hablemos un poco de ti. ¿En qué momento de tu profesión te encuentras ahora mismo?

R: Me encuentro aprendiendo cada día con diferentes proyectos. En este caso, El Árbol de la sangre para mí fue clave para sumergirme en unas emociones muy extremas de los personajes. Ahora estoy con Brigada Costa del Sol, una serie para Telecinco y Netflix que está ambientada en Torremolinos (Andalucía) en los años 70.

Me gusta cambiar de tercio y tocar diferentes palos de este trabajo. El Árbol de la sangre es una tragedia con gran contenido romántico y ahora lo que estoy haciendo tiene algo más policiaco, de acción y aventura.

Álvaro Cervantes

P: Enhorabuena. Lo cierto es que siempre te hemos visto en papeles intensos, con cierto misterio y profundidad…

R: Sí, en ese sentido, tengo la suerte de poder empezar a abrir el abanico y que las historias sean muy diferentes entre sí.

P: Antes has hablado de las redes sociales. Como actor que requieres de una presencia en las redes, ¿qué es lo que pretendes transmitir en ellas?

R: No tengo una intención muy clara. Intento que cuando pongo algo, sea porque realmente me apetece y no poner nada porque le debo nada a nadie ni porque debería de publicar una foto. Intento compartir lo que compartiría con mi gente y con mi familia.

P: Además de Brigada Costa del Sol, ¿tienes algunos proyectos más entre manos? Porque al final no te van a caber en la biografía de Twitter. [El actor describe todos sus papeles en su biografía de una manera muy original, ver aquí].

R: Sí, es verdad. (Risas) Estamos rodando Brigada Costa del Sol hasta entrado 2019. En febrero se estrenará Bajo el mismo techo, que es una película de Juana Macías protagonizada por Jordi Sánchez y Silvia Abril y yo tengo una colaboración. Es una comedia, me hace mucha ilusión entrar en ese terreno.

P: Para terminar, ¿cuál es el mayor aprendizaje que te llevas de todos estos años de trabajo?

R: El mayor aprendizaje es que el rigor genera entusiasmo y el entusiasmo genera rigor. Creo que rigor y entusiasmo van de la mano y cuando uno falla, probablemente el otro también.