Un año más, y a pesar de las complicaciones pandémicas que vamos solventando, en 35 Milímetros volvemos a asistir al Festival Internacional de Cine de San Sebastián (SSIFF 2020).
Para esta edición, la número 68, el certamen cuenta con los destacados nombres de directores como Woody Allen, Thomas Vinterberg, Rodrigo Sorogoyen o François Odon en las 19 películas en su Sección Oficial así como los de muchos otros realizadores más que hemos podido ver repartido en secciones como Perlak, Zinemira o Zabaltegi Tabakalera.
A continuación, nuestra opinión de las que hemos visto:
SECCIÓN OFICIAL
- A crock of gold
Esta vez, Johnny Depp ha pisado el festival de San Sebastián como productor (y, entrevistador) del documental A crock of gold: A few rounds with Shane MacGowan.
En este documental, Depp combina imágenes de archivo junto con animaciones y una entrevista al cantante y compositor Shane MacGowan, del grupo The Pogues. Descubriremos un personaje peculiar, dado a la bebida y a las drogas que no deja de beber durante toda la entrevista por con quien Depp mantiene una buena relación desde jóvenes.
Fascina conocer el mundo interior de una persona que, probablemente, tenga la mitad de su vida distorsionada por culpa del alcohol y que, aún así, creó música conocida internacionalmente y se convirtiera en toda una sensación en su país.
- Antidisturbios
Por primera vez, el Festival de San Sebastián admite series en su concurso en sección oficial. Así es cómo Rodrigo Sorogoyen, director de películas como El Reino o Madre, estrena la que ha sido su primera serie.
Toda una declaración de intenciones por parte del director, que utiliza el thriller de 6 episodios para seguir la investigación de asuntos internos sobre un grupo de antidisturbios de la Policía Nacional. Entre los actores de la serie hay caras conocidas cómo Raúl Arévalo, Roberto Álamo, Vicky Luengo o Álex García.
Como viene siendo habitual en Sorogoyen, Antidisturbios brilla por las actuaciones y las escenas de máxima tensión que, el director madrileño, ha aprendido a dominar a la perfección.
- Druk
A estas alturas ya sabíamos que el tándem Thomas Vinterberg-Mads Mikkelsen era apuesta segura. Lo que no nos imaginábamos hasta que punto.
Druk, la última película del director danés es un espectáculo magistral del primer al último minuto. Cuatro profesores de instituto que deciden embarcarse en un experimento sociológico en el que cada uno de ellos deberá mantener la tasa de alcohol en su cuerpo al mismo nivel durante su vida y así demostrar que, beber, les ayuda en su día a día. Un drama disfrazado de comedia gracias a las actuaciones de sus cuatro protagonistas que hicieron que nos saltaran las lágrimas de tanto reír. Una película magistral.
- El gran Fellove
Matt Dillon llegó a San Sebastián con uno de sus filmes más especiales. En El gran Fellove, el actor nos presenta un documental de lo más íntimo sobre Francisco Fellove,un cantante de scat y showman mexicano con quien Dillon mantuvo una relación estrecha durante la grabación de su último disco antes de fallecer, que nunca vio la luz.
Con una recopilación de imágenes de archivo del propio Dillon, conocemos la fascinante figura de Fellove y les acompañamos en la grabación del último disco, repasamos la historia de su vida e incluso bailamos un poco al ritmo de su música. Imprescindible seas o no, amante de este tipo de música.
- Éte 85
¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar por cumplir una promesa? Esa es la premisa con la que empieza Verano del 85, la nueva película de François Ozon.
Este drama romántico empieza cuando Alexis (Félix Lefebvre), que está de vacaciones en un pueblo de la costa francesa, casi se ahoga mientras navega con su barco. A su rescate acude David (Benjamin Voisin), con el que inicia una intensa amistad que durará todo el verano.
Basada en el libro Dance on My Grave de Aidan Chambers y con una estética que recuerda en muchos momentos a la Call Me By Your Name de Luca Guadagnino (por los colores, el tipo de historia e, incluso, como está filmada), Ozon nos invita a descubrir una escala de grises en la que nunca sabes qué está pasando en realidad. La ambigüedad se apodera de la historia y nada parece ser lo que realmente es. Una noche de sexo que se esconde tras una puerta, un accidente que parece un suicidio (¿o era al revés?), una madre que se niega a aceptar la realidad de la vida que lleva su hijo. Inventarse una realidad que no existe, o morir en el intento. Y luego, bailar sobre la tumba de alguien que una vez te prometió que lo seríais todo y al final, te dio un giro de 360 grados y te abandonó en un mundo que no te creerá. O si. Eso lo dejamos para vuestras propias conclusiones.
- Rifkin’s festival
Woody Allen vuelve a su ciudad favorita con una película sobre su ciudad favorita. Redundante, si más no. En Rifkin’s Festival el director neoyorquino filma una carta de amor a San Sebastián, situando a sus personajes en el “prestigioso festival de cine internacional” de la ciudad que, sin pronunciar nombres, toda la audiencia sabe que se trata del Zinemaldia.
Un filme típico de Allen, sin demasiadas complicaciones y unos personajes más bien tópicos. Entretenida para pasar un buen rato pero de las más flojas en contenido y guion de sus últimos años. Destaca por encima de todo una fotografía que nos regala una postal tras otra de la encantadora ciudad.
- Supernova
Cuando dos personas se dan el “Si quiero” una de las promesas más importantes que se hacen es aquella de “en la salud y en la enfermedad”. Supernova es la máxima expresión de esa promesa. Colin Firth y Stanley Tucci representan a Sam y Tusker una pareja que hace más de 20 años que están juntos. Cuando a Tusker le diagnostican Alzheimer ambos se darán cuenta que tenerse el uno al otro es lo más importante que tienen.
Con unas actuaciones sobresalientes por parte de ambos actores, que aportan una sensibilidad y naturalidad que traspasan la pantalla, la película consigue reflejar el paso de esta dura enfermedad. Deja una sensación de reflexión sobre la vida, la muerte y el amor, como pocas películas de las que hemos visto hasta ahora.
SECCIÓN PERLAK
- Never rarely sometimes always
Eliza Hittman nunca falla. Nunca. Pero en Never, rarely, sometimes, always hace un ejercicio maravilloso de sorodidad y crítica a la cerrada mentalidad de algunos estados de Estados Unidos.
En este filme nos cuenta la historia de Autumn, una apática y callada adolescente, trabaja como cajera en un supermercado rural de Pennsylvania. Viéndose obligada a sobrellevar un embarazo accidental y sin alternativas viables para poder realizar un aborto en su propio estado, ella y su prima Skylar reúnen algo de dinero y se embarcan en un autobús rumbo a Nueva York. Con la dirección de una clínica apuntada en un papel y sin un lugar en el que pasar la noche, las dos chicas se adentran en una ciudad que desconocen.
A través del viaje de ambas chicas descubriremos los temores de dos adolescentes solas ante el miedo de un aborto y los peligros que supone que el aborto no sea legal y gratuito en todo el mundo (ya no decir en cualquier país democrático). Una película que debería ver todo aquel que quiera concienciarse un poco sobre el tema para darse de bruces con la realidad que, por desgracia, sufren demasiadas mujeres en el siglo XXI.
- Nomadland
Chloé Zhao vuelve a deleitarnos con su cine. Esta vez es Frances McDormand la que se pone delante de su objetivo para traernos otra lección de actuación y saber estar.
Nomadland narra la historia de una mujer desamparada de todo y de todos, nómada por las carreteras de una Estados Unidos que la ahoga y no la deja vivir con dignidad. Y pese a todo esto, nos hace creer que es feliz.
Una dura crítica a la sociedad estadounidense que defiende estos ideales (que, aunque no lo parezca, existen) y que defiende el derecho a vivir dignamente. De las absolutamente imprescindibles de este año.
SECCIÓN ZINEMIRA
El estado contra Pablo Ibar
Esta miniserie documental al más estilo True crime americano nos explica la historia de Pablo Ibar, quien en 1994 fue arrestado y sentenciado a muerte por un triple asesinato ocurrido en Florida. Pablo ha permanecido 16 años en el corredor de la muerte y en 2016 los abogados consiguen reabrir el caso.
A través de los testimonios de sus familiares más cercanos, conocemos el caso de Pablo desde la imparcialidad de un narrador que expone el caso y hace que, el espectador, sea el juez de todo lo que ve. ¿Era Pablo el culpable? ¿O, por el contrario, lleva casi 30 años encarcelado injustamente?
SECCIÓN NUEVOS DIRECTORES
- Limbo
Una de las sorpresas de este año ha sido Limbo de Ben Sharrock, que nos presenta una mirada a los refugiados que esperan que se les conceda el asilo en una isla escocesa.
Rodada con suma frialdad, sus protagonistas hablan más con su mirada que con sus palabras. Un ejercicio de empatía que te mete de lleno en la piel de todos ellos.
ZABALTEGI TABAKALERA
- Un efecto óptico
Una pareja se va de vacaciones a… ¿Nueva York? En esta peculiar película Pepón Nieto y Carmen Machi se embarcan en unas vacaciones de lo más extrañas. Si bien ellos creen estar en la gran manzana, la realidad es que no podrían estar más alejados de la misma.
¿Dónde están? ¿Cómo han acabado ahí? ¿Por qué les suceden tantas cosas extrañas? Juan Cavestany hará que el espectador se cuestione eso, y mucho más en 80 minutos que mantendrán al espectador confuso todo el tiempo.
OTROS
- El verano que vivimos
La premisa de la película no me llamaba excesivamente la atención pero, aún así, le di una oportunidad. De esa manera pude confirmar que, probablemente, El verano que vivimos sea la peor película que veremos en esta edición del Festival de San Sebastián y, seguramente también, del cine español de este año.
Una película que no la salvan ni Javier Rey, ni Blanca Suárez, ni Carlos Cuevas. Cargada de tópicos, con un guion sin fundamento, a ratos (demasiados ratos) inverosímil… El verano que vivimos se presenta al público como un drama pero, a mi, las lágrimas que se me cayeron en la proyección no fueron por estar viendo un filme de ese género.
- Dime quien soy
Otra de las series que ha entrado a concurso este año en el Zinemaldia ha sido Dime quien soy de la cual solo se han proyectado los primeros capítulos (a diferencia de Antidisturbios o Patria, que se proyectaron enteras).
La adaptación de libro de Julia Navarro narra la historia de Amelia Garayoa (Irene Escolar) y su turbulenta biografía. Situada entre los años 30 y 40, los protagonistas se verán envueltos en los acontecimientos más importantes de la historia del siglo XX.
Ejecutada muy correctamente, al menos lo que hemos podido ver hasta ahora, la serie supone una adaptación muy decente del libro que la precede.