Título original: Five Nights at Freddy’s 2
Año: 2025.
Duración: 103 min.
País: Estados Unidos.
Directora: Emma Tammi.
Guion: Scott Cawthon, Seth Cuddeback, Emma Tammi.
Fotografía: Lyn Moncrief.
Música: The Newton Brothers.
Reparto: Josh Hutcherson, Piper Rubio, Elizabeth Lail, Freddy Carter, Skeet Ulrich, Matthew Lillard.
Compañías: Blumhouse Productions, Universal Pictures, Scott Cawthon Productions.
Distribuidora: Universal Pictures.
Género: Terror | Secuela. Videojuego. Muñecos.
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El 8 de agosto de 2014 nacía un videojuego independiente creado por Scott Cawthon, ese proyecto fue titulado como Five Nights at Freddy’s. En él, el jugador trabaja como guardia nocturno y debe vigilar las cámaras de seguridad de una antigua pizzería infantil para sobrevivir a cinco noches.
Gracias a su atmósfera, sus sustos, sus animatronics espeluznantes y una historia llena de secretos hicieron que el juego se volviera viral rápidamente. Hasta el momento cuenta con 13 videojuegos, libros y una adaptación cinematográfica. Esta adaptación fue estrenada en el año 2023 y supuso una de las películas de terror más taquilleras de los últimos años, producida por Blumhouse y con un guion coescrito por el creador original.
Por eso no es sorpresa para nadie que la secuela fuese confirmada casi instantáneamente después del estreno de la primera película y de nuevo con todo el equipo creativo detrás de la misma. Five Nights at Freddy’s 2 cuenta lo ocurrido un año desde la pesadilla sobrenatural en la pizzería de Freddy Fazbear. La historia de lo que ocurrió allí ha ido adquiriendo la talla de leyenda local, e incluso ha dado pie al primer “Faszfest”.
El exguarda de seguridad Mike (Josh Hutcherson) y la agente de policía Vanessa (Elisabeth Lail) han ocultado la verdad a Abby (Piper Rubio), la hermana de 11 años de Mike, acerca del destino de sus amigos animatrónicos. Pero cuando Abby decide reconectar con Freddy, Bonnie, Chica y Foxy, desatará una serie de acontecimientos aterradores que revelarán oscuros secretos sobre el verdadero origen de Freddy’s, desencadenando un horror que llevaba décadas escondido y olvidado.

Lo ocurrido con esta secuela resulta tan curioso como desconcertante. Por un lado conserva todo aquello que hizo que la primera película funcionara tan bien, y por otro mantiene también todas sus debilidades. Da la sensación de que no se ha intentado corregir absolutamente nada de lo que generó críticas en su momento, pero aun así se aferra con fuerza a aquello que sí gustó, como si no hiciera falta pulirlo más. Sin duda, lo mejor de la película (y uno de los mayores aciertos que hemos visto en adaptaciones de videojuegos al cine) son los animatrónicos y todo el apartado artístico que los rodea.
La dirección de arte, la ambientación y la puesta en escena están ejecutadas con un mimo evidente, ver a estos personajes en pantalla grande, tan bien trasladados y con una fidelidad tan cuidada, es una auténtica delicia. Se nota que el equipo detrás del proyecto conoce a la perfección qué espera el público: diseños respetuosos con el material original, escenarios recreados con detalle, guiños constantes a los videojuegos y un cariño enorme por la franquicia.
Desde Freddy, Bonnie, Chica y Foxy, hasta los toys y el sinfín de referencias repartidas por toda la película, todo funciona como un golpe directo de nostalgia para quienes hemos crecido con esta saga. En esta secuela, los animatrónicos vuelven a ser el punto más fuerte sin discusión, y además se aprovecha la oportunidad para ampliar el universo narrativo, dejando caer pistas para el futuro y marcando un rumbo que apunta a expandir la historia dentro del terreno cinematográfico.

Y sin duda resulta sorprendente encontrarse con una película que ofrece tanto fanservice y que, además, lo integra de manera tan orgánica. Se nota que hay un esfuerzo real por hacer que los fans sientan que esta historia está pensada para ellos: está repleta de easter eggs escondidos, referencias discretas y detalles que solo quienes conocen bien la saga captarán al instante. Pero lo más destacable es que, aun con todo ese guiño constante al público veterano, también se han preocupado de que quienes no están familiarizados con los videojuegos puedan disfrutarla sin perderse.
La película mantiene un ritmo ágil, es fácil de seguir y resulta muy entretenida, lo que la convierte en una experiencia llevadera tanto para los seguidores de siempre como para quienes se acercan a este universo por primera vez.Aun así, el principal problema (y el más frustrante) es la sensación de oportunidad perdida, tanto en esta película como en la anterior se nota que se optó por una propuesta más “accesible” para todo tipo de público, sacrificando el terror y la angustia que definían la experiencia original del juego. No hay apenas tensión, y mucho menos auténtico horror; todo transcurre con tanta calma que en ningún momento sientes que algo realmente siniestro esté a punto de suceder.
Otro gran inconveniente de esta secuela es la enorme cantidad de tiempo que dedicamos a los personajes humanos. Funcionan bien, están desarrollados con intención y resultan interesantes, pero terminan desplazando el foco de lo que realmente queremos ver. Aun así, debo reconocer que la subtrama de Vanessa aporta bastante al conjunto y es necesaria para que la historia avance. El verdadero problema surge con las pequeñas tramas paralelas asociadas al personaje de Abby: su visita al parque, la feria de ciencias y otros momentos similares. Da la impresión de que podrían haberse aprovechado para construir algo más relevante o inquietante, pero acaban sintiéndose vacíos e incluso un poco ridículos en comparación con el resto.
Todo esto no hace más que alimentar la idea de que la saga ha tomado un rumbo demasiado familiar e infantil. Se entiende que forma parte de una estrategia para atraer a un público más amplio, pero siempre quedará esa espina de pensar qué habría pasado si, en lugar de suavizar todo, hubieran apostado por un tono más oscuro, crudo, realista y verdaderamente terrorífico.
Como conclusión, Five Nights at Freddy’s 2 está lejos de ser una gran película y, siendo honestos, no funciona realmente como cinta de terror. Sin embargo, es evidente el esfuerzo por ampliar el universo de la saga y por ofrecer a los fans una adaptación cuidada, hecha con respeto y cariño hacia una franquicia que lleva años siendo tan querida. Aunque falle en ciertos aspectos, se nota la intención de construir algo más grande y de mantenerse fiel al espíritu de los videojuegos, y eso, al final, tiene un valor enorme para quienes hemos seguido la historia desde el principio.



