Crítica – ‘Antes de ti’

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Título original: Me Before You

Año: 2016.

Duración: 110 min.

País: Estados Unidos.

Director: Thea Sharrock

Guión: Jojo Moyes/Scott Neustadter/ Michael H. Weber

Música: Craig Armstrong

Fotografía: Remi Adefarasin

Reparto: Emilia Clarke, Sam Claffin, Janet McTeer, Charles Dance, Brendan Coyle

Productora: Metro-Goldwyn-Mayer / New Line Cinema

Género: Drama romántico

 

¿Qué pasaría si tu vida tal y como la conoces cambiase en solo unos segundos? ¿Y si nunca más fueses capaz de hacer todas esas cosas que te entusiasman? Este es precisamente el dilema que ‘Antes de ti’ le presenta al espectador y que ocupa al protagonista de esta historia: Will Traynor, un joven multimillonario que, debido a un descuidado motorista, se queda sin movilidad en todas sus extremidades. Accidente que pone su vida patas arriba y sume a Traynor en una profunda depresión. Este terrible acontecimiento es también la razón por la que necesita a alguien que se ocupe de su cuidado. Es entonces cuando entra en escena nuestra otra protagonista: Louisa Clarke. Lou, un torrente de energía y jovialidad, es el contrapunto perfecto y quizás el aliento que Will necesita para recobrar las ganas de vivir.

La química existente entre ambos actores es innegable en ciertos momentos de la película.

Leyendo esta sipnósis, y sabiendo que se trata de la adaptación de una de las obras de una conocida escritora romántica inglesa, podríamos pensar que nos encontramos ante un típico melodrama para adolescentes, en donde se juega con los distintos status de los protagonistas, y que culmina en una historia de lo más predecible. O quizás nos llevaría a creer que nos encontramos ante un nuevo ‘Intocable’ con protagonista femenina. Sin embargo, será a mitad de la película cuando nos percatemos de que ‘Antes de ti’ no se queda solo en simples sentimentalismos. Es entonces cuando descubrimos que la apatía del protagonista le ha llevado a contratar a una empresa médica que acabe con su vida.

Tratando un tema tan complicado como es la eutanasia estaba claro que la polémica no iba a tardar en llegar. Pocos días después del estreno del film algunos sectores han alegado que el mensaje que lanza la película es que no merece la pena vivir si eres minusválido. Puede que esto se deba a que Thea Sharrock no ha sabido transmitir de forma adecuada con la película el dolor y la frustración que lleva a Will a tomar esa terrible decisión, algo que a mi entender Moyes dejaba muy claro en su novela. Para una persona tan vital, libre y aventurera como el joven Traynor verse en esa situación de dependencia total y sufrimiento no es una vida digna. Teniendo en cuenta de que esta historia está basada en hechos reales es incompresible que gran parte del público haya buscado tres pies al gato y visto controversia en donde no la hay.  Lo que la película pretende reivindicar es el derecho de un individuo en plenas capacidades mentales para decidir libremente acabar con su sufrimiento y hacerlo rodeado de sus seres queridos. Al fin y al cabo nosotros somos los únicos dueños de nuestra vida y nadie ni nada podrá cambiar eso.

Una de las escenas en las que Emilia Clarke mejor captura la excéntrica personalidad de Louisa

Una de las cosas que siempre preocupa a la hora de adaptar un libro a la gran pantalla, es la selección del elenco. Debe de ser un casting adecuado que sepa capturar el alma de sus personajes y que se ajuste a las descripciones del autor. No obstante, tengo que decir que este quizás sea el mayor acierto del film. Una sobresaliente Emilia Clarke consigue ser el centro de todos los focos durante el transcurso de gran parte de la película. Con una expresión facial en algunos momentos hasta desmesurada,  consigue contagiar al público la histriónica personalidad llena de optimismo y vitalidad que caracteriza a Lou. De esta forma la joven actriz ha demostrado lo polifacética que puede ser puesto que es capaz de interpretar a dos personajes tan opuestos como la imponente Daenerys en Juego de Tronos y la dulce y campechana Louisa Clark en este film. En cuanto a su coprotagonista, Sam Claflin, además de encajar perfectamente en como Jojo Moyes describe a Will, lleva de forma bastante acertada el personaje, a pesar de los impedimentos expresivos que conllevaba la condición del mismo. No obstante, lo que hace reseñable este casting es la innegable química existente entre los dos actores. Las chispas que saltan entre ambos en algunas escenas claves de la película logran que el público se crea mucho más este melodrama. Del resto del elenco, y a pesar de su corta intervención en el film, cabe destacar a Janet McTeer quien traslada perfectamente el dolor de la matriarca de los Traynor, protagonizando algunas de las escenas más lacrimógenas de la cinta.

 

Emilia Clarke luciendo el famoso vestido rojo, uno de los looks más comentados del film

Otro de los grandes retos que debían afrontar a la hora de hacer de ‘Antes de ti’ una película era transformar los estrafalarios looks de Lou en reales puesto que estos eran una de las marcas más características del singular carácter de la protagonista femenina de esta historia. De nuevo, la directora cinematográfica novel Thea Sharrock ha salido airosa de este asunto. No solo han sabido capturar la esencia de Lou a través de su estética sino que han logrado que Emilia Clarke luzca estos extravagantes outfits con cierta gracia y estilo. Especial mención para los panties de abejita y como han sabido combinarlos con el conjunto refinado que la protagonista luce en París al final de la película.

Trabajo digno de resaltar también el de Craig Armstrong por la cuidada selección de los temas que conforman la banda sonora del film. Ed Sheeran, Imagine Dragons, Jessie Ware o The 1975 se mezclan para tratar de introducir por completo al espectador en la historia de Will y Lou. Armstrong consigue una perfecta sincronía entre música e imagen que provoca que la sensación de ojos llorosos, pelos de punta y carne de gallina se haga por momentos inevitable.

En definitiva, guste menos o más, es innegable que el alma de la historia que Jojo Moyes quiso retratar en su novela queda perfectamente capturada en esta adaptación cinematográfica. Risas y llantos se combinan uniformemente generando un ambiente agridulce que acompaña toda la historia y será del agrado de los amantes de los dramas románticos. Es en su simpleza y su exaltación de algunos de los tópicos del género en donde reside su excelencia, pero tampoco esperéis mucho más del film.

Lo mejor: Una sobreactuada, pero no por ello desacertada, Emilia Clarke que consigue captar de lleno la esencia de Louisa y comerse la pantalla.

Lo peor: La innecesaria polémica que se está creando por no entender adecuadamente el mensaje que pretende transmitir la película.

Nota: 7,5/10