Título original: Tamasha.
Año: 2015.
Duración: 139 minutos.
País: India.
Director: Imtiaz Ali.
Guión: Imtiaz Ali.
Música: A. R. Rahman.
Fotografía: Ravi Varman.
Reparto: Deepika Padukone, Ranbir Kapoor, Piyush Mishra, Javed Sheikh, Vivek Mushran.
Productora: Nadiadwala Grandson Entertainment.
Género: Comedia.
¿Por qué la misma historia se repite siempre? Tenemos interiorizada la rutina hasta en los cuentos que contamos y las películas que vemos. Eso mismo opinan los protagonistas de Tamasha, película de 2015 dirigida por Imtiaz Ali, uno de los directores con mejor crítica de la India. El título hace referencia al teatro tradicional maratí.
Tara (Deepika Padukone) y Ved (Ranbir Kapoor) se conocen de casualidad en un viaje que ambos realizan en solitario a Córcega. Deciden no hablar sobre el pasado y limitarse a disfrutar del presente, por lo que crean un juego de identidades inventadas y aventuras a diario: lo que pasa en Córcega, se queda en Córcega.
Como todo en esta vida, ese viaje llega a su fin y ambos deben retomar su vida real. Varios años más tarde, Tara ha conseguido expandir la empresa familiar y se muda a Delhi, ciudad en la que vive ese hombre al que conoció años atrás en Córcega y que no consigue quitarse de la cabeza. Y precisamente por esto decide buscarle, para retomar esa historia de amor con el único hombre que le ha hecho sentirse viva. Pero cuando le encuentra, Ved parece una persona totalmente distinta: es un tipo correcto con una vida normal, una rutina aburrida y mucho más triste del que conoció años atrás. Y hasta ahí puedo contar.
La química entre Padukone y Kapoor es innegable, dotando a la historia de una credibilidad contundente. Además, el uso del color y la iluminación para dividir la historia en un antes y un después de Córcega es sobresaliente: el personaje de Ved parece dos personas distintas por el diseño de vestuario, con colores y cortes que le favorecen más o menos, dependiendo del efecto que se quiera conseguir en el espectador.
Aunque lo más destacable en Tamasha sería la banda sonora, compuesta por el oscarizado A. R. Rahman, uno de los mejores músicos de la cinematografía actual. La música sabe transmitir la carga emocional que se necesita en cada momento, incluso sin que sea necesario entender la letra de la canción, y es pegadiza incluso desde la primera escucha, por lo que en ocasiones es una protagonista más de la cinta.
Lo mejor: La película en sí, todo su conjunto.
Lo peor: Que no se comercialice en occidente.
Nota: 9/10.
Namaste, amigos.