Crítica – ‘Rafiki’

Rafiki
Cartel de Rafiki, de Wanuri Kahiu

Título original: Rafiki

Año: 2018

Duración: 83 min.

País: Kenia

Dirección: Wanuri Kahiu

Guion: Jenna Cato Bass, Wanuri Kahiu

Fotografía: Christopher Wessels

Reparto: Patricia Amira, Muthoni Gathecha, Jimmy Gathu, Nice Githinji, Charlie Karumi, Patricia Kihoro, Neville Misati, Samantha Mugatsia, Sheila Munyiva, Dennis Musyoka, Nini Wacera

Productora: Coproducción Kenia-Sudáfrica; Ape&Bjorn As / Big World Cinema / MPM Film / Razor Film / Rinkel Film / Schortcut Films

Género: Drama

En un mundo lleno de odio e intolerancia es maravilloso que existan personas que intenten cambiar esta visión que impera, desgraciadamente, en nuestra sociedad. De esta premisa nació Rafiki, cuarto largometraje de la realizadora keniata Wanuri Kahiu y nominada a los Oscar como Mejor película de habla no inglesa.

Con esta coproducción entre Sudáfrica, Kenia, Francia, Países Bajos, Alemania y Noruega, el país de la directora participó por primera vez en la Sección Oficial del Festival de Cannes. La cinta también ha llegado a España, concretamente hasta la SEMINCI, para formar parte de las películas a concurso de la sección Punto de Encuentro.

Rafiki
La Iglesia tiene un peso importante en el pensamiento del pueblo

Homofobia y discriminación

En un principio, el Gobierno de Kenia prohibió el estreno en su país debido a la existencia, todavía, de leyes que penan la homosexualidad, tema del que trata la película.

Cuando se supo que Rafiki había sido nominada a los Oscar como Mejor película extranjera, un alto tribunal de Kenia levantó temporalmente la prohibición y autorizó su proyección en las salas del país del 23 al 29 de septiembre porque, según las normas de la Academia, una película debe mostrarse en el país donde se produjo durante siete días consecutivos para ser elegible.

Rafiki viaja hasta el corazón de Kenia para contar la historia de Kena (Samantha Mugatsia) y Ziki (Sheila Munyiva), dos chicas jóvenes cuyos padres se disputan la presidencia en Nairobi. Esta rivalidad hará que se estrechen los vínculos entre ellas.

Basado en Jambula tree, cuento de la escritora ugandesa Mónica Arac Nyeko, Rafiki muestra sin ningún tipo de tabú una relación lésbica en un país y en un continente donde está considerada delito y donde la Iglesia influye de una forma determinante en el pensar de la sociedad.

Algo que refleja fielmente nuestra sociedad es el grupo de amigos de Kena. Uno de ellos se declara homófobo desde el principio y Kena tiene una papeleta importante ya que tiene que decidir entre su seguridad o el amor.

Rafiki
El miedo al rechazo impide a Kena mostrarse tal y como es

¿El triunfo del amor?

El filme también muestra cómo los estereotipos de las lesbianas se siguen manteniendo. Kena representaría el papel de la mujer masculina que lleva pantalones y camisas, mientras que Ziki es la chica que se maquilla y usa vestidos.

A pesar de todos los impedimentos familiares, sociales y políticos, ambas jóvenes luchan por querer un futuro mejor. Un futuro en el que están juntas fuera de África. Un futuro en el que ellas son las que eligen su propio camino. Los colores y la música de África también ayudan a crear una atmósfera onírica en la que Kena y Ziki tienen muestras continuas de afecto entre ellas. Además, las miradas cómplices completan la carta de una bonita historia de amor.

En definitiva, Rafiki es un canto a la libertad de elegir tu propia condición sexual sin sentirte presionado ni amenazado. Los colores, la banda sonora y el amor hacen de esta relación lésbica un cuento africano precioso. Eso sí, también hay que decir que el guion y desarrollo narrativo es sencillo, típico de películas de adolescentes.

Nota: 8/10

Lo mejor: la bonita forma de contar una relación prohibida entre dos mujeres

Lo peor: guion sencillo