La minifalda en el cine

Lo confieso, mi parte favorita de la moda es la que se encarga de remover arquetipos y revolucionar el mundo. Es por eso que hay ciertas prendas que, para mí, tienen una magia especial. Es el caso de la minifalda.

Podría contar mil historias sobre su aparición: perderme en la biografía de Mary Quant y también en la de André Courréges (porque todavía se debate quién de los dos la inventó), abarrotar el artículo con imágenes de Twiggy o hablaros durante horas del llamado Swinging London. Pero aquí hemos venido a hablar del séptimo arte.

«Fue muy satisfactorio ver que no sólo las modelos de los sesenta usaban mis prendas, sino también los nobles y los millonarios. Lo snob pasó de moda y en las tiendas encontrabas a duquesas y mecanógrafas empujándose por comprar el mismo vestido. La moda se había convertido en un instrumento de igualdad” (Mary Quant)

La primera minifalda en el cine fue vista en 1956, en la película de ciencia ficción “Planeta Prohibido”. La actriz Anna Francis se encargó de lucirla. TRAILER

Dirigida por Fred Wilcox, se trata de una cinta inspirada en una obra teatral de William Shakespeare, en la que aparece un aparatoso robot llamado Robby.

A pesar de la popularidad que adquirió en poco tiempo, el vestuario de Francis provocó que se censurara en varios países, entre ellos España.

Fotograma de la película «Planeta Prohibido»

En 1967, Mary Quant -junto a otros como Paco Rabbane o el mismísimo André Courrèges- fue la encargada de diseñar algunos de los estilismos de la película “Two for The Roads”. TRAILER

Audrey Hepburn, quien interpreta a Joanne, abandona su estilo clásico y se adapta a un contexto en el que las adolescentes empiezan a vestir minifaldas. El armario de la protagonista se llena de looks deportivos y vestidos por encima de la rodilla.

Fotograma de la película «Two for the Road»

Ya en los años 70, época de musas independientes y talentosas, se estrenaron cintas que dejaban entrever la liberación que se vivía en diversos ámbitos como la moda.

Jane Fonda protagonizó “Klute”, y nos enamoró con un vestuario hecho a base de botas de cuero, bolsos de flecos y faldas muy largas o muy cortas. TRAILER

Fotograma de la película «Klute»

Mientras tanto, en nuestro país se bailaba “La minifalda”, de Manolo Escobar (Ay…).

“No me gusta que a los toros te pongas la minifalda. La gente mira p´arriba porque quieren ver tu cara y quieren ver tus rodillas.

Los niñatos tan pesaos no dejan de contemplarte. Me rebelo y me rebelo y tengo que pelearme, y a los toros no los veo.

Así que tú ya lo sabes, no te pongas minifalda, que los toros de esta tarde yo tengo ganas de verlos sin pelearme con nadie.”

Pero nadie pareció hacerle mucho caso.

En los 80 se convirtió en el uniforme oficial. Vaquera o de cuadros para las más pijas, de cuero o de lycra para las más punks. En los 90, una provocadora Sharon Stone desconcertó al mundo en un cruce de piernas.

Fotograma de la película «Instinto básico»

Actualmente, aunque su éxito va variando según tendencias, no existe vestidor -de ficción o no ficción- que no esconda al menos una. ¿Por qué no aprovechas la subida de temperatura y te atreves a lucir la tuya?

Una única condición: debe medir 36 centímetros o menos.